Chepito, desempleo y pensiones

La posibilidad de eliminar la cárcel para los que no pagan la pensión alimentaria es un proyecto ya aprobado en primer debate en la Asamblea Legislativa, el mes de febrero. La segunda votación está frenada por una consulta que hizo la Defensoría de los Habitantes a la Sala Cuarta.

De primera entrada parece una buena idea mandar a los papás morosos a buscar trabajo, pero recordemos que en este país del pobrecito puede resultar más cara la cura que la enfermedad. Con ese proyecto, que no dudo que tenga una buena intención, se abre un portillo muy peligroso para que el deudor, ese que tiene a sus hijos pasando penurias, encuentre la forma de salir bien librado si no se especifica claramente cómo se verificará si realmente está buscando trabajo y esa parte, precisamente, no está debidamente establecida en el proyecto de ley. Y si agregamos que el desempleo es uno de los problemas más graves que tiene el país, nada garantiza que este papá, aunque lo haga de buena fe, halle trabajo.

Así es que podría andar penando por semanas o meses y sus hijos pasando apuros y hambres.

Otro aspecto a considerar seriamente esquela cárcel es el único mecanismo que ha dado resultado para que las familias afectadas reciban esa pensión que les corresponde, como insiste la Defensoría de los Habitantes. Recordemos que de buenas intenciones está empedrado el camino al infierno.