Una Esperanza inquebrantable
Cuando hablamos de Esperanza hablamos de aferrarnos a algo que inclusive no conocemos. Muchas veces decimos palabras como: “Tengo la esperanza de que esa persona se levante de la cama”, “tengo la esperanzadeque mi hijo vuelva a casa”. Una esperanza basada en la confianza de que algo suceda sin saber cómo ni cuándo puede pasar. Hebreos 11; 1 nos dice: “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”, esto lo llamaría una esperanza basada en lo invisible, pero solo se puede fundamentar en Dios, cuando Dios le dijo Abraham que viera las estrellas que si era posible que las contara porque así iba ser su descendencia (Génesis 15-5) para ese tiempo Abrahán tenía 80 años y Sara tenía 70 años, quien, además, era estéril. Pero él creyó por algo que para él era imposible.
A esto le llamo una Esperanza inquebrantable, un desafío para la vida saber que iba a pasar algo sin saber cuándo, pero estaba aferrado a esa esperanza que se llama Jesucristo. No sé a qué ni dónde está puesta su esperanza, pero déjeme decirle algo: “Lo que Dios promete eso lo cumplirá”. No sé cuál es la situación que usted hoy esté atravesando, soledad tal vez desánimo, su matrimonio está apunto de destruirse y piensa que no hay esperanza que ya nada tiene solución. No se rinda, mire cada cosa a su alrededor mira a su familia y piense en lo maravillosoquees la vida, mireque cada mañana se levanta y eso se llama esperanza. Nunca es más oscuro que cuando está amaneciendo, solo mire hacia adelante, porque lo mejor está por venir para su vida.