MURO PANA DURÓ 45 MINUTOS
El primer partido de la selección de Panamá en un Mundial acabó con un 3-0 en contra ante un rival claramente superior y de mucho peso como Bélgica. Los canaleros lucharon, pero al final se impuso la potencia del contrario.
Con una emoción propia del debut, el equipo de Hernán “Bolillo” Gómez salió con alegría y orden a la cancha del estadio Olímpico de Sochi, en el que le aguantó, casi contra todos los pronósticos, el ritmo fuerte que impuso el rival en el primer tiempo.
Desde que cantaron el himno nacional, con su capitán Román Torres soltando una lágrima al vivir el histórico momento, los panameños no se dieron por menos y con orden resistieron los ataques belgas, mientras ellos jugaban a la contra con inteligencia.
Ni con todas sus estrellas Bélgica podía romper el muro pana, que lucía sólido como el Canal de Panamá, pero lamentablemente para los centroamericanos, apenas iniciado el segundo tiempo Dries Mertens (47’), Romelu Lukaku (69’, 75’) Olímpico de Sochi un golazo abrió y el partido.
Dries Mertenes, atacante del Nápoles, sin dejar que la bola se ensuciara, la pegó con el empeine desde el costado derecho, un leñazo imposible para JaimePenedo a los 47 minutos.
A partir de ahí a Bélgica se le acomodó la mejenga con un doblete de Romelu Lukaku a los 69 y 75 minutos, el primero de cabeza luego de un centro de Kevin de Bruyne y el otro con una asistencia de Eden Hazard, el negrazo definió abajo a la salida de Penedo. chazo del portero tunecino para adelantar a los suyos. Cuando parecía que Inglaterra montaría la fiesta, el defensor inglés Kyle
Panamá la tuvo cerca dos veces, con una jugada a las espaldas de los defensas que Michael Murillo no pudo definir ante la salida de Thibaout Courtois y otro remate casi desde media cancha que pegó un susto al meta del Chelsea, quien la sacó apenassobre el arco.
El próximo juego de los panas será el 24 de junio, a las 6 a.m hora tica, en la ciudad de Nizhni ante Inglaterra, mientras que Bélgica jugará un día antes contra Túnez en Moscú.
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Walker le mandó un codazo a un rival dentro del área y el silbatero señaló la pena máxima sin pensarlo mucho.
Problemas. El empate, anotado desde los doce pasos por Sassi, y la falta de contundencia de los europeos animó a los hombres de Nabil Maaloul, que en la segunda mitad salieron con la intención de jugar el balón y esa actitud puso a los ingleses a sudar tacacos.
Inglaterra se limitó a presionar y buscar el error del rival, la desesperación les estaba ganando la partida y las opciones se perdían en la gramilla delVolgograd Arena. Inglaterra, al parecer, volvería a revivir los fantasmas del pasado.
Pero llegó el respiro, la liberación de estres, gracias a un tiro de esquina desde la izquierda, que le permitió a Kane aparecer y sellar con un certero cabezazo el gol del triunfo para el equipo de la rosa al 91. Un cierre dramático que transformó en alegría lo que había sido un calvario para los ingleses.