Selfilocura con presi
ROMEROS APUNTADOS
de la República, Carlos Alvarado, y varios políticos alborotaron a los romeros que estuvieron presentes ayer al mediodía en la explanada de la basílica de los Ángeles, una vez finalizada la misa en honor a la Virgen.
Alver al presi, los peregrinos se la jugaron para conseguir un selfi con él y se olvidaron por un momento de las oraciones y las peticiones que le llevaban a la Negrita.
Alvarado no lo pensó mucho, ya que es bueno para todo lo que tenga que ver con ese tipo de cosas y se dedicó a complacer a un montón de gente que le se acercó a buscar la foto del recuerdo.
El presi se mostró aún más accesible con los más chiquitos, quienes demuestran que la tecnología es lo suyo.
Unode los afortunados fueMathías Serrano Orozco, un niño de seis años y vecino de Guadalupe de Cartago, que pudo conocer al presidente y tomarse una foto con él.
A Mathías le echó el hombro su mamá, Xiomara Orozco, quien se encargó de tomarles la foto con la que el pequeñín podrá contarles una gran historia a sus compañeritos del kínder Carlos Peralta, en Cartago.
“Estoy muy feliz de haber conocido al presidente, él fue muy amable conmigo”, nos contó Mathías.
Plan se concretó. Otro que se contagió con la selfimanía fueMariano Fedulo, quien tiene cinco años y es vecino de Dulce Nombre de Cartago. El niño hizo mesa gallega, ya que primero le sacó una foto al mandatario y después se hizo un selfi a su lado.
“Le pude tomar la foto y hasta le di la mano. Yo voté por él en las elecciones infantiles y quería conocerlo y, además, ver a la Virgencita”, dijo el niño.
Mariano se robó el show porque con determinación y seguridad se acercó a Alvarado, le dio la mano y le pidió tomarse la foto. Ante semejante actitud, el presi no tenía cómo negarse, ya que el güila se lo echó a la bolsa con su forma de ser tan abierta.
Además, el presidente revisó cómo había quedado la foto por si había necesidad de tomar otra. Mariano aprovechó que la primera dama estaba presente y también la invitó a posar.
Muy solicitados. Pero no solo Carlos Alvarado estuvo solicitado por los fieles católicos, ya que una experiencia similar vivieron la vicepresidenta Epsy Campbell y Rodolfo Piza, ministro de la Presidencia, quienes también sacaron el ratito para compartir con los peregrinos.
A Campbell la buscaron muchas señoras y algunos niños que deseaban una foto para el recuerdo, como la que le pidió Mia Sink, vecina de Curri y quien admira mucho a Epsy. La popularidad y don de gentes deRodolfo Piza también quedaron en evidencia cuando posó con una gran sonrisa para complacer a José David Marín, un chiquito vecino de Quedradilla de Cartago.
Los selfis siguen a la orden del día y los políticos lo saben.