La Teja

Augusto guarda silencio

- ✦ BRYAN CASTILLO bryan.castillo@lateja.cr Este viernespor

la noche varios videos publicados en redes sociales mostraron el momento en el que una mujer le desbarató el carro a un hombre identifica­do con el nombre de Augusto.

El hecho ocurrió en el parqueo del Centro de Eventos Pedregal en Belén, a eso de las 10 de la noche, durante el concierto de Gondwana y Cultura Profética.

Al parecer, la mujer, quien sería novia de Augusto, se molestó porque él estaba hablando con dos muchachas más, esto la habría motivado a dejar solo al sujeto e irse directo al parqueo.

Estando ahí lo llamó por teléfono y le pidió que llegara al carro en el que ambos habrían llegado y que conducí a Augusto; sin embargo, él prefirió no aparecer, por lo que la joven decidió agarrarla contra la navezota.

Se tiró el rollo. Uno de los que vio este espectácul­o fue un joven de apellido Álvarez. Él prefirió reservarse el nombre por temor a que la mujer lo busque para destrozarl­e el carro.

“Yo tenía el carro como a diez metros de donde estaba ella, se veía desesperad­a, al principio no sabía que era, pero luego con los gritos que pegaba me di cuenta que estaba peleando con un mae”, contó.

Álvarez aseguró que algunos que estaban en el lugar sacaron sus teléfonos para grabar el momento, pero que otros como él estaban asustados.

“Ver a una mujer así asusta a cualquiera porque uno no sabe si tiene algún arma o que con alguna parte del carro ella golpeara a alguien. Yo ni sabía cómo sacar el carro porque tenía miedo de que se me tirara”, contó en tono serio.

“Lo malo fue que la seguridad apareció hasta tiempo después y otra gente le empezó a echar carbón, yo creo que eran compas de ella que en vez de decirle que parara más bien le decían que se subiera al carro”, añadió.

Augusto habló poco. Este lunes llamamos a Augusto solamente para conocer su versión y para que él aclarara si realmente estaba con otras mujeres; sin embargo, cuando y nos presentamo­s nos dijo que no lo molestáram­os.

Le consultamo­s si era novio de la mujer que le hizo pasar semejante vergüenza, pero cuando íbamos por la mitad de la pregunta nos tiró el teléfono.

Para buena suerte de Augusto, el carro no está a nombre suyo, sino que es propiedad de Alamo Rent a Car, empresa que se encarga de alquilar vehículos.

Federico Barquero, gerente de la compañía dio pocos detalles sobre el caso, pues firmaron un con-

trato de confidenci­alidad con la persona que alquilo el auto, que en este caso sería Augusto.

“El carro está en untaller y probable mente lo entreguen en una semana”, finalizó.

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CORTESÍA. La mujer se subió al carro que alquiló Augusto.

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