PLAN FISCAL EN ESPAÑOL
Fonseca es un traductor fiscal, pero ¿qué es eso? Él es un funcionario del Ministerio de Hacienda que intenta poner en palabras sencillas el contenido del proyecto de Ley de fortalecimiento delas finanzas públicas, másconocido como plan fiscal.
Cuatro de estos traductores fiscales estuvieron ayer en la avenida Central, en Chepe, con sillones y un cartel, con la intención de explicarle a la gente que pasaba por allí el contenido de este proyecto de 142 páginas, tan difícil de digerir para la mayoría por ser tan técnico.
Si usted no pasó por San José este martes, La Teja sí lo hizo y le mandó a estos traductores las principales dudas que tienen los ticos sobre este espinoso tema:
–¿Qué es ese bendito plan fiscal?
El plan fiscal son medidas que debimos haber tomado desde hace muchísimos años para actualizar nuestro sistema de impuestos, de deuda y de gasto público de acuerdo a las demandas actuales.
De lo contrario no habrá recursos para financiar adecuadamente educación, salud, seguridad y justicia. Todo estos servicios se pagan con impuestos y si están diseñados de una forma que son fáciles de evadir, todos nos vemos afectados. –¿En qué me afecta a mí el plan fiscal si soy un simple breteador?
Las leyes que crearon los impuestos de ventas y renta se hicieron en los años ochenta, fueron diseñados para la economía de aquella época, por eso ahora no alcanzan.
Si los impuestos siguen teniendo un diseño de hace treinta años, la única alternativa que tiene el Estado para hacer sus pagos es en- deudándose y como resultado las tasas de interés y el tipo de cambio de dólar suben.
Entonces cualquier asalariado que tenga un préstamo con el que haya comprado casa, carro o para pagar los estudios, se verá afectado en la cuota porque le subirá un montón de plata más.
Con un impuesto de valor agregado como el que se quiere crear (el cual sustituiría el actual impuesto sobre las ventas del 13%), la compra de la comedera le puede costar tres mil colones más en promedio a una familia. Si no se hace así y no se aprueba el plan fiscal, la cuota del préstamo puede subirle a esa misma familia en ochenta mil o cien mil colones al mes. Y, además de eso, los intereses afectarán también los costos de producción de las empresas, por lo que mucha gente se quedará sin trabajo.
–¿Por qué me piden a mí pagar más impuestos mientras el Gobierno sigue pagando altos sueldos y no controla el gasto?
Todas las entidades están trabajando en controlar el gasto. El presupuesto de este año va muchísimo más bajo y algunos incentivos salariales se redujeron para las nuevas contrataciones.
Se han rebajado todas las partidas hasta donde se puede, pero no podemos dejar de lado que la gran tajada del gasto público son las áreas donde más se necesita invertir, como los ministerios de Educación, Seguridad y Poder Judicial.
–¿Y lo del impuesto a la renta cómo queda? ¿Se hace justicia y los que tienen más, tributan más?
El impuesto a la renta se cobra de tres formas. A los asalariados, a las actividades empresariales (que se declara cada año) y los impuestos sobre las ganancias de capital, que se cobran a quienes tienen acciones, bonos, fondos de inversión y grandes propiedades.
El diseño del impuesto a la renta se hizo en milnovecientos noventa y ocho y dejó por fuera o con tasas más bajas a las ganancias de capital. Esto se modifica en este proyecto de ley para que se contribuya más solidariamente, se eliminan abusos de gente que ponía sucursales en otros países para evadir impuestos.
–¿Cuándo se tiene que aprobar este plan fiscal para evitar caer en una crisis?
Ya estamos entrando en una crisis, estamos tardísimo y llevamos 16 años buscando una estabilidad fiscal. Ya el dólar ha subido bastante en estos últimos días. Ya a nivel internacional nos están viendo con recelo, ya tenemos un endeudamiento altísimo. En otros momentos hemos tenido suerte y pudimos conseguir plata prestada en el extranjero, eso nos permitió sobrevivir, pero eso se acabó. Es una responsabilidad tomar una decisión en este sentido ya.