Ahorre y vacune a las deudas
Está de moda hablar de deudas grandes y pequeñas. Es bueno saber cómo salir de ellas y, quizás lo más importante, cómo no llegar a tenerlas en un nivel que resulte asfixiante.
Una de las medidas preventivas es ahorrar, que a veces parece imposible, pero no lo es. La subgerente financiera de Mucap, Maureen Gómez, nos da algunos bolados y nos dice que es bueno buscar asesoría personalizada que nos muestre el camino.
“Lo primero es crearse el hábito (del ahorro) para tener ese colchonchito que permita cumCuentas claras. Para saber de cuánto dispone trace un presupuesto con sus ingresos y gastos totales, desde los fijos (alquiler, hipoteca, pago de la escuela de los chiquillos, el diario, servicios públicos) hasta aquellos antojos que compra a diario y que son conocidos como gastos hormiga porque “roban” la plata de a poquitos.
Estos ahorros programados le dejan mayores ganancias que los ahorros a la vista, precisamente porque usted no los puede tocar antes de un plazo prefijado.
Los ticos siempre hemos sido gastones, pero antes era otra cosa: nuestros abuelos o padres no tenían las “facilidades” que hay ahora para gastar más de lo que se gana.
“Ahora podemos comprar prácticamente sin tener el dinero en el momento, usted se lleva el artículo y después empieza a pagarlo”, recuerda Gómez.
Es bueno enseñarles a los niños lo que cuestan las cosas y a ahorrar, eso les servirá mucho cuando sean grandes.
Cuando ya estén en edad escolar, ábrales una cuenta de ahorros y enséñeles a saber para qué se ahorra y que vean materializado el sueño.