Puré medicinal
Cartaguito fue la inyección de ánimo que necesitaba el Monstruo
Saprissa venía mal y le urgía un respiro y ¿qué mejor lugar para levantarse que el Fello Meza contra un Cartaginés que está acostumbrado a revivir equipos?
A Wálter Centeno le dieron una dosis de puré de papa y le cayó de maravilla porque con el triunfo de 2-1 ante su amigo Hernán Medford, el Sapri llegó al segundo lugar y dio un paso gigante para meterse en semifinales.
Por si las moscas el mal arbitraje terminó de empujar al Monstruo a la victoria. La pésima actuación del central Brayan Cruz y su asistente número dos, Josué Mejía, perjudicaron seriamente a los brumosos, aunque también le fallaron a la “S”.
La cosa pintaba mal desde antes que arrancara el juego porque la Comisión de Arbitraje cambió dos veces el réferi nombrado. Primero pusieron a Adrián Elizondo (Brayan no estaba nombrado para ningún juego), pero se lesionó; después nombraron a Benjamín Pineda (Brayan estaba nombrado para el juego Guadalupe - Herediano); y por último intercambiaron árbitros: Pineda para Guada y Brayan para Cartago.
Los brumosos arrancaron con todo y antes de cumplirse el primer minuto casi vacunan al Monstruo en una jugada en la que por un pelito no llegó a cerrar Jorman Sánchez.
El balde de agua fría para el equipo de Hernán Medford cayó al minuto siete, cuando se escapó por izquierda el chamaco, Manfred Ugalde, y con medio regate dejó en el piso a Jameson Scott que se vió muy mal en esa jugada, y definió perfectamente ante la salida de Darryl Parker.
Darryl al minuto catorce se encargó de frenar la segunda anotación de los morados con una gran tapada a Christian Bolaños.
Polémica arbitral. Al minuto 21 empezó el show de los árbitros. Hay que recordar que Cruz ha sido fuertemente criticado por ser hijo de la instructora arbitral de la Federación Costarricense de Fútbol.
Jurguens Montenegro se le escapó a Roy Miller, el saprissista lo agarró para que no se fuera, claramente era el último hombre, se merecía la tarjeta roja según el reglamento.
Lo triste es que Brayan no iba a pitar nada, Mejía le cantó la infracción y después de que conversaron entre ellos solo le sacó la amarilla. Si Cartaginés empataba en esa acción otro gallo hubiera cantado en la mejenga.
El árbitro pitó mal para ambos lados. Cinco minutos más tarde, perjudicó al Monstruo porque Yostin Salinas sacó un centro rastrero y pegó claramente en el brazo de Rónald Mauricio Montero, pero el central se hizo al loco.
Al 30 los de casa tuvieron un gran chance de empatar, José Sosa cobró un tiro de esquina que iba cayendo olímpico, pero una mano salvadora de Kevin Briceño lo evitó.
El cuadro que dirige Hernán Medford empató al minuto 32, pero Brayan y Josué anularon el gol injustamente.
Cristopher Núñez robó un balón y se lo puso a Marcel que a su vez se lo dio a Jurguens para que matara; según el par de árbitros, el cubano estaba en posición prohibida. Solo ellos pudieron verla.
Y tras de cuernos, palos para los de la Vieja Metrópoli, pues del colerón con el árbitro pa s a ron al chichón porque les volvieron a anotar.
Saprissa salió rapidísimo, Venegas le puso un pase de lujo a Rándall Leal que entró por izquierda y cuando llegó al área remató cruzado para poner el 2-0.
Al 44’ Marcel recibó desde un costado y pateó de derecha, la pecosa iba para adentro, pero Briceño voló y a una mano la tiró al saque de esqui
na. La torta del día casi se la jala Kevin, cuando se jugaba el primer minuto de reposición. No se habló con Ricardo Blanco y tampoco agarró el balón, Montenegro no supo definir y Blanco recuperó rapidísimo para salvar.
Se puso bueno. Los brumosos entraron con todo al complento y al 50 consiguieron descontar, gracias a un gran tiro libre por derecha que cobró Sosa y le llegó perfectamente Marcel para clavar el golcito.
Nueve minutos después Julio Cruz, si hubiera tenido el pie más grande la mete, porque por centímetros no pudo cerrar un centro de Jorman.
Al final no se movió más el marcador, Brayan terminó siendo el peor de la noche y los tres puntos se fueron para Tibás.