Suelto y confío
¡Quiero llorar! ¡Ya no sé qué hacer, estoy desesperada con esta cuarentena! esto me comentó una persona deseando encontrar una solución. así se encuentra mucha gente después de estar casi dos semanas encerrada en sus casas debido a la crisis del coronavirus.
Tal desesperación no es de extrañar, ya que no estamos acostumbrados al silencio. no nos gusta estar con nosotros mismos. le tenemos miedo a la paz. sin embargo son disciplinas que se pueden aprender en lugar de concentrarnos en el pánico, la desesperación o el aburrimiento.
Cuando somos conscientes de que podemos llegar a un estado más elevado en nuestro interior es más fácil hacer elecciones que ayuden al crecimiento. sabremos que no todas las soluciones están fuera de nosotros mismos en resumidos consejos prácticos o decisiones políticas. se trata de trascender, de darle paso a nuestra más profunda sabiduría. Confiar en nuestro propio ser. Confiar en los cambios de la vida, en la Madre naturaleza y en los ciclos de Universo. es poder llegar a una fe tan grande, que se puede expandir con energía y luz las palabras: sUelTO Y COnFÍO. dejar de aferrarse a pensamientos limitantes y obsesivos si no se suelta la vida se estanca.
Por ejemplo, el miedo hace que apretemos el puño y hasta se llora. Pero si se confía en que algo bueno puede venir después, pase lo que pase se estará con mejor salud mental y física.
Con pensamientos positivos se pueden abrir puertas y avanzar. Trabajando sobre la marcha el día a día con responsabilidad y consciencia. Crear nuevas realidades en la adversidad. También es aceptar las emociones tal como llegan. se vale llorar, preocuparse, angustia y dolor. lo normal como seres humanos es sentirlas y expresarlas sin reparo.
Pero después hay que respirar profundo para volver a levantar el vuelo de la vida. aceptar la realidad de lo que pasa. Pero después pensar, actuar, y asumir el sUelTO Y COnFíO.