Pandemia no acabará con el amor
El amor es la relación básica del ser humano, solo por él se expande el sistema de la vida y aumenta la percepción del sentido de totalidad, los más grandes enemigos del amor son el miedo y la indiferencia. el miedo debilita la pulsación vital y lo transforma en angustia; la indiferencia supone la muerte del amor.
En la indiferencia las personas antes amadas pierden significado, la fascinación por ellas palidece, la fantasía se agota y el deseo se apaga. el arte del cultivo amoroso implica ternura, percepción del detalle. es creativo.
El que tiene y siente amor lo tiene todo, la tierra, la paz, amar es un valor.
Las relaciones humanas se sostienen en un dar y recibir amor, sin embargo, cuando hablamos de recibir y dar amor, no siempre somos tan agradecidos y sensibles para verlo, vivirlo y corresponderlo.
La mayoría de las personas desean vivir y disfrutar relaciones afectivas amorosas, leales, seguras y recíprocas, pero existen múltiples factores que impiden sostenerlas en ese lugar.
La responsabilidad es un factor protector, evidencia la madurez de la persona y el compromiso por la convivencia hacia el bien común y la armonía con la pareja, la familia, amigos y comunidad.
Pregúntese, ¿cuál es la importancia que le damos a nuestra relación afectiva?
La responsabilidad está muy ligada a las experiencias de vida, en la medida en que la personalidad se desarrolle sanamente, las posibilidades de éxito serán mayores. cuando nuestras historias de vida nos impiden mayor apertura a las experiencias afectivas positivas o no se tiene madurez emocional, el éxito será más difícil.
El secreto está en mantener un alto grado de responsabilidad frente a situaciones y toma de decisiones, en la habilidad de la pareja para estar abierta al entorno y ser guardiana de lo íntimo para no compartir lo que no se debe, con quien no es.