Árbitra impuso ley en Champions
La Juventus, con su pasaporte a octavos ya asegurado, goleó ayer 3-0 al Dynamo de Kiev en la penúltima jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones, donde la atención se centró en la árbitra francesa Stéphanie Frappart.
La silbatera se convirtió en la primera mujer en dirigir un partido de la Liga de Campeones.
Días atrás, cuando se dio a conocer el nombramiento, se habló mucho de la oportunidad que le dieron a la réferi de 36 años que se ha ido ganando este tipo de oportunidades gracias a su buen rendimiento y el cual confirmó de nuevo.
Frappart voló bajó el radar, no fue protagonista, se le vio tranquila, hablando con los jugadores de manera correcta, quienes demostraron mucho respeto y tranquilidad para hablar con ella.
Varios futbolistas de la Juventus y el Dynamo incluso se acercaron para saludarla, lo que marcó una relación cordial en la cancha.
Mano dura. Cuando debió aplicar el reglamento lo hizo, sacó tres tarjetas amarillas, dos al Dynamo y una a la Juve y hasta mandó a revisar por el VAR el segundo gol de la Juventus, obra de Cristiano Ronaldo, el cual validó cuando le informaron que estaba en posición reglamentaria.
En lo que fue el juego, Federico Chiesa abrió el marcador de cabeza (21), Cristiano Ronaldo hizo el 2-0 (57) y Álvaro Morata rubricó el 3-0 (66), que da los tres puntos a la Juventus, segunda clasificada del grupo G, que intentará asaltar el primer puesto el martes en su duelo contra el líder, el Barcelona, que ganó 3-0 al Ferencvaros, duelo que definirá al ganador del grupo.
Colmillo. Frappart ya dirigió la Supercopa de Europa en agosto de 2019, en la segunda división femenina (2014) y en la Ligue 1 (2019). También comandó un partido oficial masculino, el Malta-Letonia el pasado 6 de septiembre, en la Liga de las Naciones.
Además fue designada en el 2019 como la mejor árbitro del mundo según FIFA.