Crisis llega a los tamales
Los tamales de este diciembre nos agarran con el bolsillo golpeado por la crisis que trajo la pandemia.
En más de un hogar se hacen números para ver de qué manera cumplen la tradición sin pagar caprichos por productos como el chile dulce, la zanahoria o la carne de chancho, por ejemplo.
Los consumidores esperarían que los productores se pongan la mano en el corazón y piensen en sus clientes. Claro, ellos deben ganar porque también se han visto afectados.
Lo cierto ahorita es que las tamaleadas de este año serán muy distintas a otras.
“Desde que me casé, hace 27 años, hago tamales para la familia que formé. Siempre fueron unas 150 piñas, pero este año la economía se me vino al piso y con la carne de chancho tan cara, solo haré unas 50 piñas”, nos dice doña Rebeca Ramírez, de Santo Domingo de Heredia.
Como ella hay muchas personas más.
Doña Rebe daba asesorías educativas a niños de escuela y a jóvenes de colegio, por eso sus entraditas quedaron en cero desde marzo y ha pasado un 2020 durísimo.
Este será el diciembre en que menos tamales hará, ya vio que los ingredientes no están para nada baratos. “La carne de cerdo es de lo más caro, a casi cuatro mil el kilo, pero también el chile dulce y la zanahoria”, explicó.
A doña Rebeca le encanta ponerles aceitunas a sus tamales, pero esta vez comprará unas poquitas para echarle al menos a diez piñas. El precio que tienen se lo prohíbe.
“No me voy a complicar, el principal ingrediente del tamal es el amor, si usted prepara la masa con buen amor, todo le queda sabroso. Los tamales de este año apenas olerán a carne de cerdo y tendrán poquitos ingredientes, pero sabrán deliciosos, lo garantizo”, advirtió la esposa de don Francisco Quesada, con quien tiene 3 hijos y 2 nietos.
Chancho volador. Patricia Rojas, directora ejecutiva de la Cámara de Porcicultores, nos confirmó que desde mediados de noviembre el precio del cerdo comenzó a subir y ahora está más caro que en los once meses pasados.
“La posta de cerdo, que se mantuvo en 3.000 o 3.500 colones, está por encima de ese precio”, nos dijo.
“Mi recomendación es que no dejen de consumir cerdo, compren otros cortes que no sean tan caros, como posta de paleta e incluso recortes, son más cómodos”, dijo Rojas.
¿Baratos? No. La crisis de la pandemia no bajará los precios de los ingredientes para los tamales en las ferias del agricultor, por ejemplo, de acuerdo con lo conversado con don Gerardo Tencio Cordero, miembro de la junta directiva de Junta Nacional Ferias del Agricultor.
“Para nadie es un secreto que este año ha sido difícil para todos, por eso los precios no están caros, están muy parecidos a los del año pasado. No habrá mucha variante, por eso digo que el tamalito de este año mantendrá precios del año pasado, eso sí, está difícil que sean menores”, explicó don Gerardo.
Veamos, el kilo de hojas soasadas anda entre 600 y 800 colones en la feria, el kilo de zanahoria supera las cinco tejitas y peligra que llegue a mil colones, el chile dulce está a 200 colones la unidad y la vainica sí está cara, a mil colones el kilo. La papa está alcanzando los 1.500 colones.
Quienes escogen comprar los tamales hechos se toparán con que los precios son l i geramente más altos que en el 2019.
José Fallas, dueño de la tamalara Mi Familia, nos cuenta lo que ha visto en los precios de los productos que debe adquirir.
“Empecé comprando la hoja a 250 y en este momento lo estoy pagando a 400 colones el kilo, pero no sabemos cuánto más va a subir; la vainica la compraba entre 500 o 600 y la estoy pagando a mil y hasta 1.200. Los productores juegan con eso (subir los precios) porque es época de tamales, no solo somos nosotros, hay un montón de familias que también hacen”.
La cadena de alzas viene desde el productor y llega a los clientes...
En dos platos, que el 2020 sea un año de pandemia no influirá en precios más baratos en los productos para los tamalitos. ¿Qué queda? Pues encontrar la manera de hacerlos sin que cuesten un ojo de la cara.
Aproveche cada cinco. La chef profesional Candy Zamora nos dio una buena lista de bolados para que la platica nos rinda.
“Como primer consejo les comento que yo uso una buena harina de maíz para hacerlos, hay muchas marcas y resulta más barato hacerlos así que usar maíz cascado, por ejemplo”. Tomen nota.
“En este momento la carne aún no sube tanto de precio así que podemos comprar un poco desde ya y congelarla hasta el momento de usarla, luego la cocinamos y ese mismo caldito lo usamos para hacer el arrocito tradicional de los tamales. Les recomiendo (que el arroz) sea uno de menos grano entero, de esta forma sale más económico, puede ser de 60%”, recomendó.
Con los olores aconseja comprarlos en las ferias porque salen más baratos y están más fresquitos.
“Recuerden que pueden ponerle las cositas al gusto, esos secretitos de la abuela que todos tenemos, y las hojitas a buscar en los mercados porque es ahí donde están los mejores precios”, concluyó. Y hagámosle caso a doña Rebe: pongámoles mucho amor a los tamalitos.