BARRANTES ILUMINAN NAVIDAD GRIEGA
Un griego de cepa sabe que la Navidad llegó cuando los alrededores de la casa de la familia Barrantes, en la Virgencita de Grecia, se ven llenos de luz.
Y no lo dice La Teja, griegos de corazón como Mauricio “Chunche” Montero, José Francisco Porras y la cantante Sharon Abarca nos contaron lo que representa para la comunidad el gran esfuerzo que hace esta familia para iluminar la Navidad griega, más en un año tan difícil como este 2020.
Por ejemplo, al Chunche no tuvimos que darle muchas señales cuando le preguntamos por la casa, de una adivinó de cuál le estábamos hablando.
“Paso por ahí todos los días, es una atracción muy grande para cualquiera que pase por ese lugar, que además es una zona muy linda. Los que vienen de Sarchí se la topan de frente y los que van de Grecia pasan por un puente como debajo de la casa”, contó el querido exfutbolista y director técnico.
Para Montero cuando ya empieza la época navideña todos quieren darse una vuelta por ahí para verla y comprobar si está igual que todos los años o descubrir la novedad que incorporaron.
“Cada año le ponen más luz, empezaron con la casa, luego se ampliaron a los árboles que hay alrededor, luego la cerca, luego el portón y ya ahora la adornaron toda”, recordó el exdefensor manudo.
Aseguró que ahí empieza la Navidad, con la iluminación de la casa de los Barrantes que llena del espíritu a todos los griegos y sarchiseños.
Atractivo de la zona.
“La gente para los carros y comienza a sacar fotos, como desde un kilómetro de largo toman la foto y se ve preciosa”, dijo Mauricio.
Montero nos dijo que no tiene la suerte de conocer a los dueños de la casa, pero por mientras les hace pique y tiene bien decorada su casa, aunque no dispone de tanto terreno como ellos.
“Tengo las verjas de afuera, las puertas y ventanas, un pequeño jardín donde coloco un reno, dos santas pequeñas y un aparato raro que me compré ahí grandísimo, pero que alumbra un montón. La tengo bien iluminada también, nada más que en chiquitico”, contó con orgullo el rojinegro.
Después de semejante introducción que nos hizo el Chunche corrimos a buscar al responsable de tanta luz en Grecia.
Alberth Barrantes (hijo) nos contó que iniciaron con la tradición aproximadamente hace unos siete años y cada año le van agregando más y más bombillos led.
“Tenemos de todo, ponemos cascadas para hacer la forma de la casa, unos arbolitos con luces, hacemos arcos con luces, figuras, espirales. Este año pusimos más juegos de luces, decoramos una tapia nueva que pusimos en la casa”, detalló Alberth.
Eso sí, para que luzca tan hermosa le deben poner bonito a la trabajada durante 15 días y participan tanto doña Carmen Rodríguez como su esposo Alberth Barrantes, sus dos hijos Alexandro y Alberth Barrantes, y recientemente se incorporó en la tradición familiar, la novia de Alberth, Leidy Rojas.
Para que se haga una idea, desde la calle principal, hasta
el fondo, donde termina la decoración, hay 80 metros, por otros 24 de ancho.
Algunos adornos los mandan a traer a Estados Unidos porque están diseñados para soportar las inclemencias del tiempo de allá que son más rudas que las ticas, soportan hasta nieve.
Para los lugareños ese es un punto de referencia, pues el mismo Alberth comentó que cuando les preguntan la dirección de su casa y empiezan a dar algunas señas, de inmediato les dicen: “ah, no me diga que ustedes viven en la casa que decoran bonito”, lo que demuestra que es bien conocida.
“Uno cuando ve tenemos gente al frente de la casa tomando fotos desde la calle, los carros que pasan se detienen para guardar un recuerdo”, agregó el joven de 22 años.
Y si usted pensó que la decoración era para ilusión de los niños que viven en la casa, le contamos que ya todos son adultos, pero mantienen intacto su gusto por estas fechas decembrinas.
Más o menos como desde mediados de noviembre ponen manos a la obra para que todo esté bien lindo y por aquello de que no haya atrasos porque alguno llegó tarde a la casa, el encendido y apagado de la decoración está automatizado y se prende a las 6 p.m. y se apaga a las 10 p.m.
Claro, como comprenderán este gusto tiene su costo y el treponazo en el recibo de electricidad es de 120 mil colones a lo acostumbrado. Y eso que usan luces led para economizar.
“Tenemos la virtud de que hay un espacio bastante grande que se presta para ello y que es de frente y como vivimos en un alto, entonces eso ayuda bastante”, recordó el griego.
Alegra corazones. El exportero del Deportivo Saprissa y la selección nacional, José Francisco Porras, quien sigue trabajando en la institución morada, reconoce que la iluminación de la casa es una linda tradición que ilumina el espíritu de la gente de la zona y que él la disfruta cada vez que puede.
“Es importante que, incluso en estos tiempos de covid-19, en este año tan complicado, se haya mantenido la tradición porque alegra a todos los que pasamos por ahí”, comenta Porritas, quien es nacido en el puro corazón de Grecia.
La cantante Sharon Abarca, quien participó en la reciente temporada de Tu Cara Me Suena, está totalmente identificada con lo que ella consideró un verdadero símbolo navideño del cantón griego.
“Es imposible no ver esa casa, la iluminan lindísimo, es una casa que alegra incluso desde lejos porque a la distancia se distingue. Iluminar tan bonito una casa refleja alegría, por eso la transmite fácilmente”, comentó.
Le encantó que este 2020, a pesar de pandemia, las bombillitas acudieron puntuales a la cita.
“Iluminar este año, un año tan particular y con tantas dificultades, incluso podemos decir con tantas cosas negativas, en verdad que es de agradecer porque uno siente bonito en el corazón porque el simple hecho de adornar es muestra de solidaridad por parte de los Barrantes, la decoración hace que en realidad uno se sienta mejor”, dijo la artista.
Es, para Sharon, autopista de felicidad a doble vía, porque los Barrantes adornan con mucha alegría y reciben, a la vez, mucha alegría de la gente.
“Uno adorna y alumbra la casita para uno y para los demás, porque uno adentro no está viendo las luces, pero sabe que afuera hay gente disfrutándolas”, reflexionó Alberth Barrantes, a quien cada año atropella, y duro, el espíritu navideño.