“Empezó a hacerme comentarios hirientes”
“Estuve saliendo con un muchacho y la pasamos muy bien, fue muy bonito, pero en determinado momento me empezó a hacer comentarios hirientes como: ‘a usted le gusta llamar mucho la atención’, ‘por eso usted se maquilla’, ‘usted es muy coqueta’, ‘sus amigos siempre están primero’, ‘¿por qué tiene que ser siempre tan cariñosa y amable con todo el mundo?’. La verdad no me identifico con esas frases, solo soy una persona que se cuida, se quiere y trata bien a la gente, tengo amigos y actividades. Traté de explicárselo, pero su respuesta siempre fue que soy orgullosa y poco humilde. Todo esto ocurrió en menos de dos meses de estar saliendo con él. Entonces dejé de salir con él, pero insiste en buscarme”.
1. la decisión de seguir o no es suya. No podemos perder de vista que una persona nos puede resultar interesante y atractiva, pero esto no justifica el hecho de tener una relación. conocer a alguien es un proceso.
2. desde las primeras etapas tenemos que tener los ojos abiertos para conocer a una persona en todos sus aspectos: valores, principios, formas de ser, puntos de coincidencia, áreas de negociación y, por supuesto, procesos de aceptación, tolerancia y respeto. cuando detectamos incompatibilidades, no significa que una relación no pueda servir.
3. Frente a esto, se habla y planteamos nuestros puntos de vista y abrirnos a procesos de comunicación, que nos permitan conocernos, respetar nuestra esencia y establecer negociaciones.
4. la comunicación constructiva, flexible y respetuosa no es negociable. sin estos elementos podría ser una relación complicada.
5. No basta con que nos guste la persona o los buenos momentos. la capacidad de negociar, escuchar y comprender es la que nos puede ayudar a determinar si estamos con alguien con el que se puede construir una relación.