Hasta el título quedó en cenizas
Un incendio, la madrugada de este martes, dejó a dos familias sin casa y otra vivienda con daños menores en Curridabat.
Una de las familias afectadas es la Aguilar Ramírez, que la noche del lunes celebró con una cenita en burbuja la graduación de quinto año de su hijo Jurguens, a quién le entregaron su título pero el fuego lo devoró.
Las llamas se desataron 300 metros al sur de la muni de Curridabat, a eso de las 2 a.m.
El Cuerpo de Bomberos aseguró que el fuego arrasó con unos 300 metros cuadrados.
Johanna Ramírez, hermana de Jenny, una de las afectadas, nos contó que la familia ha pasado por momentos muy difíciles, primero porque por la pandemia sufrieron la reducción de sus jornadas salariales, además, su hermana sufre de piedras en un riñón y lleva mucho tiempo esperando que la operen, por lo que le toca usar un catéter urinario.
“En la casa viven mi hermana, el esposo, mis sobrinos y mi hermano menor, no sabemos qué provocó el fuego. Fue la graduación de mi sobrino, él estaba en el Liceo de Curridabat, y mi cuñado (Johnny Aguilar) trabaja en seguridad, él dice que antes de irse a trabajar revisó todo en la casa y no había nada encendido, en tres días los bomberos nos van a dar el informe”, dijo Johanna.
Pepino, el perrito que pertenece a Jurguens, fue el héroe de la noche.
“La casa es de madera y duró menos de siete minutos para quemarse, Pepino se fue al cuarto de mi sobrino Jurguens y empezó a ladrarle como loco y a tirar todas las cosas que había cerca, daba vueltas desesperado, mi sobrino fue el que se despertó y se dio cuenta de que la casa estaba quemándose, él logró despertar a todos para que salieran, de no ser por el perro no sabemos qué hubiera pasado”, dijo.
La familia Aguilar tiene mucho tiempo de vivir en la casita, pues el dueño les había dado una opción de compra, pero ahora no saben qué va suceder, por el momento en el Colegio Don Bosco les dieron un espacio para que pasen estos días.
Lamentablemente también se quemaron dos perritas, una cieguita y otra cachorrita, además de una gatita.
“Tenemos un dolor muy grande por la casita, por los animalitos, porque ellos perdieron todas sus cosas, mi sobrino perdió la ilusión con que recibió el título, todo, todo lo devoró el fuego”, dijo Johanna.
Platica se quemó. Don Jhonny Aguilar aseguró que ellos tenían en la casa un dinerito para pagar los marchamos y se quemó.
“Mi esposa me llamó desesperada, que la casa se quemó, mi hijo que se graduó también había estado trabajando para comprarse unos tenis y se le quemó esa platita, pero gracias a Dios ellos están bien”, dijo.
Si usted quiere ayudar a está familia ellos necesitan ropita, alimentos, cualquier electrodoméstico y materiales de construcción. Puede contactarlos al 8703-3815, esa línea tiene Sinpe Móvil por si desea hacer algún donativo. También al 8634-5678.
El otro afectado por la emergencia es don Luis Diego Chacón, quien vive junto a su tío y al que los gritos de los vecinos los despertaron.
“Al abrir la puerta de la habitación vi el resplandor anaranjado y entendí lo que estaba pasando, me fui hasta el cuarto del fondo, donde duerme mi tío, y le dije que había que salir, apenas puede agarrar la billetera y el celular”, relató.
“Yo ya me había acostado a dormir porque tenía que entrar a trabajar a las 6 de mañana, hacía teletrabajo desde aquí y ahora nos quedamos sin la casa”, dijo.
Lo que más le duele a don Luis es que la casita que se quemó la construyó su abuelito y pasaron muchas generaciones por ella.
“No nos quedó ni una foto de recuerdo”, lamentó.