La cruz volverá a brillar
La muy conocida Cruz de Alajuelita, en el cerro San Miguel, volverá a brillar por las noches y formará, de esa forma, parte de las celebraciones del patrono de ese cantón, el Santo Cristo de Esquipulas.
La iluminación será mañana (día del Cristo
Negro) a las 8 p.m., en medio de atronadoras bombetas y la bendición n del cura a párroco del santuario nacional, el padre Enriique Rivero.
El alcalde de alajueliteeño, Modesto to
Alpízar, nos os contó que, desde mediados del año pasado, en medio de la pandemia, nació la idea de darle esta gran alegría a la comunidad.
“Queremos que la cruz sea un símbolo positivo pa para los ala alajueliteño ños y toda la gente de la Gran Á Área Metropolitana, que sea una luz de esperanza que diga que los años que vienen serán mejores.
“También es un acto para consolidar las raíces del cantón con la gente que vive acá.
Además, va a servir para fortalecer nuestra relación con Jesucristo, por eso se hace en medio de las celebraciones de nuestro Cristo Negro”, explicó el alcalde.
Buena breteada. La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) tiene varias semanas de estarse fajando duro para tener a punto el tema de las luces. La Cruz se pintó con luz reflectante y lo que se hará es que seis potentes focos, de al menos 10 mil watts, la iluminarán.
Lo primero que hizo la CNFL, hace como seis meses, fue evaluar cómo estaba el sistema eléctrico y a partir de ahí la muni asumió los costos. En esta ocasión no hubo aporte de la empresa privada ni recolectas entre los alajueliteños.
“Vamos a subir varias personas, incluido el padre Rivero. Desde las siete y media de la noche arrancaremos con un pequeño acto muy lleno de Dios y esperanza, para que, a las ocho, en medio de un juego de pólvora, se ilumine nuestra tan querida cruz”, explicó Alpízar.
La alcaldía le meterá más mano a la vigilancia de todo el sistema de iluminación.
“Subiremos constantemente a cuidar y a revisar que todo el sistema esté trabajando bien. En principio, decidimos cubrir con una malla protectora los focos para evitar que los quiebren con facilidad. Queremos que la cruz brille de noche por muchos años, así que la cuidaremos”, aseguró don Modesto.
Símbolo. La cruz alajueliteña está ubicada en el cerro San Miguel, a 2.036 metros sobre el nivel del mar. Mide 26 metros de alto y 11 metros de ancho. Su base es de concreto, la cual mide 5,50 metros de lado y 3,50 metros de profundidad. Fue inaugurada el 8 de julio de 1934 por el padre Rosendo Valenciano.
Costó 32 mil colones y el material fue parte de una donación del Gobierno del presidente Ricardo Jiménez, que regaló lo que sobró de la construcción del muelle de Puntarenas, y donaciones de la comunidad.
Según la alcaldía de Alajuelita, en 1931 se tenían datos de que en el cerro San Miguel existía una vena volcánica y se pensaba que ahí iba a aparecer un cráter, por eso, buscando una protección divina, los vecinos decidieron crear un signo religioso que le diera protección al cantón.
En 1984 fue iluminada por primera vez y así se mantuvo por al menos cuatro años, hasta que la instalación eléctrica fue destruida por los vándalos. El 23 de abril del 2015 se volvió a iluminar como parte del Festival Internacional de las Artes. En ese mismo año se apagó porque el sistema eléctrico sufrió un nuevo ataque.
6 potentes focos iluminarán la Cruz de Alajuelita en el cerro San Miguel