La Teja

TOROS A LA TEJA

- Jorge Arturo González

Clandestin­os

recuerdo que hace muchos años se usaba la palabra “contraband­o”, y que esta era una señal inequívoca de que alguien hacía negocios contrario a lo que dicta la ley. lo que más se escuchaba era el contraband­o de licor, que también tenía el nombre de “guaro contraband­o”, “guaro charral”, y algunos le decían “pedo e’ chancho”.

Quienes fabricaban este licor eran llevados a la cárcel. Se les destruían sus artefactos de fabricació­n, se les multaba y a muchos los tildaban de delincuent­es.

También se hablaba de contraband­o de ganado. a quienes ejercían esta insana “profesión” se les llamaba “cuatreros”, y desde esos años, (hablo de los años 50, 60 y 70), existían algunos que destazaban las reses en los potreros. a estos les modernizar­on la terminolog­ía, y les decían “ladrones”, y no “cuatreros”. A finales del 60 y principios del 70, en la fortuna de bagaces, escuché por primera vez hablar de la marihuana, y un compañero de fútbol que, por razones familiares no menciono su nombre, fue el primero en hablar y aceptar que la consumía.

Él viajaba mucho a las zonas bananeras y era visto como el: “mero Satanás”. Cuando llegué a Palmares, la situación seguía siendo tema de cuidado, pero ya era más libre, aunque seguía siendo ilegal.

Y para qué les digo del tema de los gais. le adelanto que en esos tiempos la palabra gay no se conocía, pero también era un tema de muchísimo cuidado. Curioso, porque los toros y los gallos de pelea eran legales, es más, fueron la primera fuente de progreso de las comunidade­s por décadas y décadas, pero las cosas han cambiado. los que en aquellos años fuimos legales, hoy somos ilegales, y “casi” delincuent­es, los otros temas como que han pasado a ser muy aceptados por la sociedad. ejemplo: que se cuide más hoy a un perrito que a un niño.

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