Fidelidad a la distancia
la pandemia ha creado distancias. algunas parejas han tenido que lidiar con largos periodos de separación y muchas veces distanciados por miles de kilómetros. ella está aquí y él en otro país, condición que también ha sido frecuente por la migración forzada. cuando el tiempo se prolonga, es común que las parejas se cuestionen hasta cuándo se mantendrá la fidelidad, y específicamente cuánto tiempo puede pasar un hombre y/o una mujer sin tener relaciones sexuales. curiosamente y aunque sorprenda, la respuesta es la misma para ambos en el sentido, que tanto los hombres como las mujeres pueden pasar sin vida sexual indefinidamente. recordemos que el sexo es una necesidad básica para la especie, pero no para el individuo, es decir, para la naturaleza es muy importante la procreación, ya que asegura la permanencia y sobrevivencia de los seres vivos, pero la misma naturaleza no le ha dado otras funciones vitales al sexo, por esa razón se puede pasar semanas, años, lustros, décadas y hasta la vida entera sin tener relaciones y sin que esto repercuta negativamente en el organismo. sirva de ejemplo, la enorme cantidad de personas que optan por la castidad por razones filosóficas, religiosas o culturales. los especialistas en conducta humana hemos podido documentar el comportamiento sexual de miles de personas que, siendo asiduos de la sexualidad, optan por la abstinencia sexual cuando, por cosas de la vida, tienen que alejarse transitoriamente de la pareja.
Pero el asunto va más allá, en la práctica clínica vemos a diario parejas que se han mantenido fieles durante largos periodos, al estar lejos del ser amado, y por el contrario abundan aquellos que son infieles aún cuando viven, cohabitan y duermen día a día con su pareja. es decir, no es el tiempo, no es la distancia la que define la fidelidad, es la motivación la que marca la diferencia. como bien resumía aquella vieja máxima de Nietzsche “cuando se tiene un por qué, se soporta cualquier cómo”.