Suerte nos sonrío al final
De nuevo. Canadá nos ganó 3 a 0 y ahora vamos contra ellas en cuartos
La selección femenina de Costa Rica vivió en una ruleta rusa lo que podía ser su clasificación a los cuartos de final de la Copa Oro en una jornada en la que acabó en un sorteo ante Puerto Rico para definir al tercer mejor segundo del certamen.
Al final la suerte terminó sonriéndole a las ticas con lo que avanzó a los cuartos de final adonde ahora se las verá el sábado de nuevo ante las canadienses por ser el peor y el mejor clasificado.
El sorteo se dio porque pues ambos equipos quedaron igualados en puntos, goles a favor, goles en contra y en tarjetas amarillas, por lo que era el único procedimiento que restaba en el reglamento.
Luego de caer 3-0 ante Canadá en el primer duelo del grupo C, Paraguay triunfó 3-2 ante El Salvador con lo que clasificó como segunda con seis puntos y las cuscatlecas quedaron últimas sin unidades.
De antemano, se sabía que la misión con Canadá era dificilísima, es una selección muy completa, décima en el ranking FIFA femenino y que a cualquier torneo que entre lo hace para competir.
La Sele tenía otro panorama claro, para pensar en una clasificación a las norteamericanas había que sacarles algo para, al menos, pensar uno de los dos mejores terceros lugares, que no nos golearan, que aquello no fuera una una paliza que de una vez nos dejara sin ilusión.
Lamentablemente, hasta que teníamos la cuesta superempinada, perdiendo 3-0 es que las ticas salieron a pellizcar reducir la ventaja, pues perder por solo dos goles no daba el chance de ese tercer lugar, con un marcador más amplio ya poníamos el destino en manos de otros.
Aunque se trate de la primera Copa Oro de la historia, hay que ver hasta dónde es válido aplicar el discurso de que estos campeonatos nos sirven para crecer o sí estábamos para competir más.
El rival de las ticas no era Canadá, creo que nadie llegó a este partido pensando que se podía ganarlo y el error en esta copa fue ese, en aquel estreno ante Paraguay se le tenía que sacar más, dado que no era una selección para perder, como al final sucedió, ahí se quedó el boleto.
Con las canadienses sigue habiendo mucha distancia, por el juego aéreo nos mataron tres
goles de cabeza en circunstancias muy parecidas que, lamentablemente, sobre la marcha no se pudo corregir.
Apenas a los 11 minutos nos filtraron una bola a las espaldas para la cabeza de Jordyn Huitema, pase que Jessie Fleming metió de manera exquisita y que la zaga nacional se durmió.
Muy poco les duró a las ticas esa red con la que podía jugar de goles porque a los 27 ya tenía el segundo adentro, ahora con un cabezazo de Shelina Zadorsky en el primer palo por donde estaba ubicada Daniela Solera, lo que marcaba por donde iba la cosa.
La Sele estaba jugando sobre una capa de hielo muy delgado, que podía quebrarse en cualquier momento, el 2-0 nos metía de terceros de una, pero un gol calcado fue el 3-0 y con la misma anotadora, otra vez en la cabeza de Zadorsky cerrando ahora en el segundo palo.
Con el 3-0 Costa Rica quiso descontar, pero no pudo.