Así se hace la bebida de la inmortalidad
la kombucha se puso de moda, ¿sabe qué es y cómo prepararla?
En los últimos cinco años la kombucha se ha puesto de moda en Costa Rica. Para muchos, es algo muy nuevo, y otros ni sabían que existía; sin embargo, esta bebida tiene más de dos mil años de existencia y es tan buena para el cuerpo humano que en Asia también se le conoce como la bebida de la inmortalidad.
Hablamos de una bebida considerada como el papá de los alimentos. ¿Por qué? Porque está cargada de probióticos y antioxidantes. Es santa palabra para desintoxicar el hígado y la sangre, cargar el cuerpo de energía, mejorar la digestión y enfocar la mente.
Japonés.
“Kombu” en japonés significa alga y “cha” significa té; o sea, kombucha significa té de alga.
Los japoneses le pusieron ese nombre porque para preparar la bebida se ocupa un hongo que se parece a unas algas y en Oriente es conocido como hongo chino, hongo japonés y hasta como hongo ruso; es decir, varios países se pelean su origen.
Vamos a ser más específicos, esta bebida es un té negro o verde endulzado, el cual se mete en un proceso de fermentación con el hongo “scoby”. Esa palabra (”scoby”) son las siglas en inglés de “cultivo simbiótico de bacterias y levadura”.
Alejandra Irola, especialista en nutrición, nos explicó cómo es la creación de esta curiosa bebida.
“El cultivo de bacterias y levadura se le agrega al té y estas se alimentan del té azucarado y así lo transforman en kombucha. Son las bacterias y la levadura las que realizan el trabajo de fermentación para que logremos la bebida.
“Ya hay varios supermercados en el país, así como ferias orgánicas, que venden el ‘scoby’. Eso permite que, incluso, en nuestras propias casas podamos hacer la kombucha,; de hecho, ya es muy popular aquí que las personas se hagan su propia bebida”, explica Irola en su Facebook “Quedicelanutri”.
¿Qué contiene?.
La nutricionista explica que la kombucha tiene muchas propiedades saludables.
“Gracias a la fermentación del azúcar, que producen la levadura y las bacterias, cada vaso de este té es rico en vitaminas del complejo B (B1, B2, B3, B6, B9, B12). Además, tiene vitaminas C, D, E y K.
“Tiene enzimas que ayudan a la digestión y el metabolismo; ácidos orgánicos como el láctico y el acético (por eso su particular sabor); minerales como el hierro, potasio, zinc, manganeso, cobre, calcio y magnesio.
“Incluso, tiene probióticos, diferentes bacterias que le ayudan al cuerpo a mejorar la salud intestinal y el sistema inmunológico; polisacáridos y polifenoles que trabajan como antioxidantes, lo que significa que protegen las células”, añade Irola.
¿En qué nos ayuda?.
Nos recuerda la nutricionista que, a partir del 2020, producto de la pandemia provocada por el covid-19, los ticos y el mundo entero entendimos la importancia de tener un sistema digestivo saludable, y eso provoca la kombucha, ya que ayuda al crecimiento de la microbiota (bacterias que habitan en la piel, el aparato digestivo, incluida la boca, y el aparato genital).
“Mientras más saludable la microbiota, más saludable el sistema inmunológico. Ayuda la kombucha con la colitis y el estreñimiento. Al tener prebióticos, le colabora a las bacterias que son beneficiosas para la salud humana, como las de tracto gastrointestinal.
“Además, al ser una bebida fermentada promueve el crecimiento de bifidobacterias (que son parte de la microbiota) y eso significa un menor riesgo de enfermedades. Puede ser un gran aliado para desinflamar el estómago, hidratar por la cantidad de minerales que tiene y ayuda a que no crezcan bacterias de las que afectan la salud”, aseguró doña Alejandra.
También es buena para prevenir problemas como gota, reumatismo, artritis y cálculos renales; disminuye algunos síntomas de la menopausia.
Es recomendadísima para combatir los efectos negativos de los antibióticos porque le ayuda al funcionamiento del hígado, ayuda a mejorar la claridad mental, baja el estrés y también se toma cuando se tiene insomnio.
Regula la presión arterial, previene enfermedades tan duras como la diabetes, cáncer, infecciones intestinales y urinarias. Reduce el dolor de cabeza y la migraña, entre otros beneficios.
¡Cuidado!.
Eso sí, como todo en la vida, nada es color de rosa, por eso la nutricionista nos hace una importante advertencia.
“Si alguien va a ponerse a hacer kombucha en su casa debe buscar el ‘scoby’ bajo en calorías, hay algunos con niveles muy altos de azúcar, por eso los diabéticos deben elegir con cuidado.
“No es complicado de hacer, diga que va a hacer yogur casero, es el mismo método, a partir de yogur usted hace más yogur, es lo mismo. Se puede mezclar con té, como es la tradición, pero también con una bebida de alguna fruta.
“Es ideal para personas con trastornos digestivos. Se debe ser muy aseado con todo el proceso para evitar infecciones. Siempre se deben usar recipientes de vidrio, el plástico es poroso y se quedan siempre residuos”.