Chepito y la humildad
la soberbia que ha tenido la junta directiva de alajuelense la hizo aterrizada la noche del viernes un grupo de aficionados en las afueras del aeropuerto Juan Santamaría.
Para que no existan confusiones, no estamos para nada de acuerdo con que una agrupación de personas violentas lleguen a ofender y a agredir a jugadores, técnicos o dirigentes.
Dicho eso, la Liga por fin despidió a andrés Carevic del puesto de director técnico y no lo decimos porque así lo quisiéramos, sino porque era muy evidente que el ciclo de él en el club se había cumplido hace rato, pero solo ahí adentro no lo querían reconocer. el problema de alajuelense es que crea que con echar a don andrés se acabó la bronca y no, esta es apenas la punta del iceberg. esta junta directiva, que insistió mil veces con que Carevic era el técnico ideal, se llevó este horrible episodio por no escuchar y actuar a tiempo. la ventaja es que para lo que sí tienen tiempo, sobre todo el proyecto liderado por Joseph Joseph, es para enderezar un rumbo más torcido que la torre de Pisa.
Pero para lograrlo tienen que ser humildes y escuchar, no solo a la afición, sino a todas esas leyendas que piden que no las ignoren, porque tienen mucho que aportar.
También tienen que dejar muchas malas prácticas, como la autocrítica, que no existe; los fichajes bomba, que no sirven para nada más que para meterle presión al equipo; fichar por fichar en vez de llenar campos sensibles, dejar de poner técnicos sin experiencia y volver a meterle identidad al cuadro. la crisis es profunda, veremos si la incrementan o la disminuyen.