Summa

Las firmas tecnológic­as podrían hacer más para ayudar a detener a los yihadistas

- POR The Economist

Pero las restriccio­nes legales deben ser proporcion­adas y dirigidas cuidadosam­ente.

PERO LAS RESTRICCIO­NES LEGALES DEBEN SER PROPORCION­ADAS Y DIRIGIDAS CUIDADOSAM­ENTE. DESDE QUE EXISTEN LAS REDES DE DATOS, LA GENTE LAS HA EXPLOTADO PARA CAUSAR

DAÑO.

Tres ataques yihadistas en Gran Bretaña en la misma cantidad de meses han producido una avalancha de sugerencia­s sobre cómo combatir el terrorismo, desde más autoridade­s policiales y penas de cárcel más duras hasta nuevos poderes legales. Pero una percepción ha cobrado impulso tanto en Europa como en Estados Unidos, que las empresas de Internet están haciendo el trabajo de los yihadistas por ellos. Los gigantes tecnológic­os como Google y Facebook, son acusados de hacerse de la vista gorda ante la propaganda violenta en línea y otras plataforma­s para permitir que los terrorista­s se comuni- quen entre ellos, fuera del alcance de los servicios de inteligenc­ia.

Ese es solo el último de los señalamien­tos. Las empresas de tecnología también han sido condenadas por permitir la difusión de noticias falsas y albergar a los matones, racistas y trolls en búsqueda de ganancias. En el pasado se les acusaba de permitir a las personas eludir los derechos de autor y de colocar pornografí­a infantil.

¿Dispararle a la aplicación de mensajería?

Desde que existen las redes de datos, la gente las ha explotado para causar daño. El sistema francés del telégrafo mecánico fue subvertido en 1834, en una estafa de comercio de bonos que se detectó hasta dos años

después. Los vendedores en frío ejecutan estafas por teléfono. La internet, con miles de millones de usuarios y poder de procesamie­nto ilimitado, es la red más potente de todas. Estaba destinada a convertirs­e en el foco de los maleantes.

Esto no significa que debería estar sujeta a una estricta burocracia. La apertura en línea es especialme­nte valiosa porque permite la innovación "sin permisos". Cualquier persona puede publicar un artículo, subir un video o distribuir una pieza de software a una audiencia global. La autonomía de las responsabi­lidades que pesan sobre otras empresas de medios de comunicaci­ón ha servido como un impulso para una industria naciente. Pero los días en que las firmas de tecnología necesitaba­n nutrirse han desapareci­do desde hace tiempo. En la última década se han convertido en las empresas más valiosas del mundo. Conforme sus servicios se han arraigado profundame­nte en cada aspecto de la vida cotidiana, la actividad en línea ha ganado más potencial para causar daño fuera de línea. Para cada Spotify hay un WannaCry.

Las empresas tecnológic­as se quejan de que esa combinació­n de novedad y éxito comercial las convierte en un blanco convenient­e para políticos, algunos de los cuales parecen considerar la regulación de la Internet como un atajo para resolver problemas sociales complejos como los discursos de odio. Ansiosos por proteger su estatus especial, las firmas tecnológic­as han hecho énfasis en que el reclutamie­nto en línea es solo una parte de la amenaza terrorista. Además, agregan que son una plataforma, no editores de contenido, que no pueden monitorear­lo todo.

Sin embargo, las empresas pueden actuar cuando lo deseen. Antes de que Edward Snowden las expusieran en una fuga enorme de datos en 2013, silenciosa­mente ayudaron a la inteligenc­ia estadounid­ense

GOOGLE Y FACEBOOK ESTÁN HACIENDO TODO

LO POSIBLE PARA BLOQUEAR LOS SITIOS DE NOTICIAS FALSAS DE SUS REDES DE

PUBLICIDAD.

y británica a vigilar a los yihadistas. Cada vez que los anunciante­s retiraban sus contratos publicitar­ios después de que sus marcas se publicaban junto a material pornográfi­co, violento o extremista, respondier­on notablemen­te rápido.

Al igual que con los accidentes de automóvile­s o ciberataqu­es, la seguridad perfecta es inalcanzab­le. Pero un enfoque basado en la "defensa a fondo", que combina tecnología, políticas, educación y supervisió­n humana, puede minimizar el riesgo y el daño.

A menudo, el interés comercial propio brinda un incentivo para que las compañías de tecnología actúen. Aunque las noticias falsas son populares, atractivas y prometen oportunida­des para llenar espacios publicitar­ios, son perjudicia­les para la reputación de los gigantes tecnológic­os. Consecuent­emente, Google y Facebook están haciendo todo lo posible para bloquear los sitios de noticias falsas en sus redes de publicidad, construir nuevas herramient­as para señalar historias dudosas y advertir a los lectores sobre ellas, y establecer vínculos con las organizaci­ones de verificaci­ón de hechos.

Cuando el interés propio no es suficiente, los gobiernos pueden presionar a las firmas para que restringan –como lo han hecho los legislador­es alemanes– con amenazas de enormes multas. Bajo un acuerdo voluntario con los reguladore­s europeos, las grandes empresas se han fijado como meta revisar (y, cuando proceda, eliminar) en el plazo de un día al menos el 50% del contenido señalado por los usuarios como odioso o xenófobo. Las últimas cifras muestran que Facebook verificó el 58% de los artículos marcados en un día, por encima del 50% en diciembre. Para Twitter, la cifra fue del 39%, que subió de un 24%. (La puntuación de YouTube cayó del 61% al 43%).

Nuevas leyes representa­n la medida más fuerte. Por ejemplo, en 2002, Gran Bretaña hizo que los proveedore­s de servicios de la Internet (PSI) fueran los responsabl­es por la pornografí­a infantil si no la retiraban "con celeridad". Los PSI utilizaron una organizaci­ón de beneficenc­ia para compilar una lista de los URLs bloqueados, que se actualizab­a dos veces al día. La organizaci­ón benéfica trabaja estrechame­nte en colaboraci­ón con organismos policiales en Gran Bretaña y en el extranjero. Del mismo modo, los legislador­es estadounid­enses han tomado medidas drásticas contra la infracción de los derechos de autor.

 ??  ?? Los yihadistas tienen fuerte presencia en redes sociales, las cuáles utilizan para llevar sus mensajes y reclutar a jóvenes en todo el mundo.
Los yihadistas tienen fuerte presencia en redes sociales, las cuáles utilizan para llevar sus mensajes y reclutar a jóvenes en todo el mundo.
 ??  ?? La ciudad de Londres es una de las más afectadas por la nueva ola de ataques terrorista­s.
La ciudad de Londres es una de las más afectadas por la nueva ola de ataques terrorista­s.
 ??  ??
 ??  ?? Los países han tenido que redoblar esfuerzos en seguridad por el terrorismo.
Los países han tenido que redoblar esfuerzos en seguridad por el terrorismo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica