ACOMPAÑANDO AL CLIENTE SIN EXCUSAS
DESDE HACE 20 AÑOS, LA ASEGURADORA SALVADOREÑA SISA APOSTÓ POR UNA ESTRATEGIA DE NEGOCIOS BASADA EN LOS CLIENTES Y SUS RESULTADOS LA RESPALDAN.
LOS ESFUERZOS COMERCIALES ESTÁN ORIENTADOS A TODOS LOS CANALES DE
DISTRIBUCIÓN.
No fallarle al cliente cuando más lo necesita ha sido el norte de la aseguradora salvadoreña SISA. Eduardo Montenegro, su presidente, señala que el momento de un siniestro es crítico para demostrar la capacidad de la aseguradora de cumplir ágilmente con su promesa de servicio.
“El resultado es una percepción muy positiva sobre SISA, una aseguradora que sí paga. Nos enorgullecemos de esa reputación impecable. Este enfoque se vuelve una ventaja competitiva que, aunada a una fuerte posición patrimonial, nos permite mantener nuestro lugar de liderazgo en el mercado”, resalta Montenegro.
Por otro lado, los esfuerzos comerciales están orientados a todos los canales de distribución, especializados en entender y atender las necesidades de cada segmento, ya sean líneas personales, bancaseguros o mercados corporativos. “Además, estamos convencidos de que el futuro es digital, de manera que hemos estado trabajando en temas de eficiencia e invirtiendo en tecnología de forma importante. De esta manera, hemos implementado nuestras líneas rápidas de emisión de seguros de Automotor, nuestra app SISA Assist (la primera en El Salvador que usa GPS para brindar auxilio vial) y acceso a mercados de jóvenes y futuros consumidores a través de una participación muy activa y novedosa en redes sociales”, argumenta el ejecutivo.
Números que respaldan
Al 30 de junio del presente año, la aseguradora reporta una rentabilidad mayor (el ROE fue de 13,18%) y posee uno de los patrimonios más altos de la región con US$53,55 millones. “A nivel local, nuestro patrimonio es, por mucho, el más alto del mercado, reflejo del compromiso de nuestros accionistas, acorde con la posición de fortaleza financiera y solvencia de nuestra compañía. Está muy por encima del requerimiento legal en términos relativos y aún más en términos absolutos. Además, la buena rentabilidad se da sobre la base de un capital mayor al mínimo requerido por nuestra legislación”, sostiene Montenegro.