Almeida vive hoy más que nunca
Pienso que enfrentar la muerte era para él un deber como todos los que cumplió a lo largo de su vida; no sabía, ni tampoco nosotros, cuánta tristeza nos traería la noticia de su ausencia física(...). Fui privilegiado testigo de su conducta ejemplar durante más de medio siglo de resistencia heroica y victoriosa, en la lucha contra bandidos, el contragolpe de Girón, la Crisis de Octubre, las misiones internacionalistas y la resistencia al bloqueo imperialista.