Militares por la paz

Las contribuciones militares de algunos países tienen un lado oculto que no aparece en las estadísticas ni en los reportes de las misiones

De vez en cuando las Naciones Unidas disponen el envío de misiones con el fin de pacificar zonas conflictivas del mundo. 16 de ellas se encuentran vigentes, la mayoría en África y el Medio Oriente, y otras en Kosovo, Chipre, Haití, y la frontera entre India y Pakistán. Cada una tiene su propio nombre, como Minusma en Malí, Minurso en el Sahara Oriental y Minustah en Haití. Y cuentan con personal proveniente de varias naciones, siendo Monusco en el Congo la de mayor tamaño, con 18,728 militares y 3,317 civiles. El total general de militares a febrero pasado era de 91,846.

Entre los países contribuyentes, la República Dominicana figura con 13 expertos militares, pero no tropas. Los países más grandes de la región tienen, como es lógico, una mayor presencia. Brasil con un total combinado de 1,277, Argentina con 461, Perú con 236, Colombia con 43 y México con apenas 30.

Llaman la atención, sin embargo, los aportes de algunos pequeños países, por ejemplo El Salvador con 219, Guatemala con 240, Nepal con 5,158, y la minúscula Fiji con 644, casi igual que España y algo menos que los 792 de Alemania. Resalta en particular la participación de Uruguay, con 1,271. Aparte del heroísmo y vocación de servicio que les anime, las contribuciones de algunos de esos países tienen un lado oculto, de tipo económico, que no aparece en las estadísticas ni en los reportes de las misiones. Y es que son una fuente de ingresos para sus fuerzas armadas.

Hay militares uruguayos en varias misiones incluyendo, por supuesto, en Haití. La decisión de la ONU de poner fin a la Minustah a más tardar el próximo octubre supuso un duro golpe para los uruguayos asignados a la misión, cuyo número ya ha descendido.

En 13 años rotaron doce mil soldados, y la ONU paga actualmente 1,100 dólares mensuales adicionales a su salario regular. Se estima en US$600 millones el total recibido por Uruguay en esos 13 años de la misión. 

gvolmar@diariolibre.com