Cosas que no se entienden...

En este país se ve de todo, desde prácticas ancestrales que son un atentado al buen juicio, hasta novedades que nadie sabe de dónde salen, y que pretenden demostrar que todos somos unos tarados.

1. Un vertedero a orillas de un gran río. Llama poderosamente la atención el interés de instalar un vertedero de basura a pocos metros de uno de los ríos principales del país, particularmente cuando se acaba de anunciar un plan para resolver el problema que plantean los tantos vertederos sin control diseminados por toda la geografía nacional, porque cuando alguien ofreció una salida científica al tema de la basura fue rechazado por los más interesados en resolver ese problema.

2. Exenciones a un negocio que castiga a sus clientes. Un estudio ha señalado el sobreprecio que pagan los usuarios del transporte de pasajeros, y ni hablar del transporte de carga. Sin embargo, hasta hace poco, ese negocio recibía exenciones millonarias en combustibles, operación que se convirtió en una gran mafia ante los ojos de las autoridades y nadie movió un dedo.

3. Extraño silencio. El de los empresarios agrícolas e industriales, y el Gobierno, que son los principales empleadores de mano de obra haitiana en el país. Quizás digan que esa es “su contribución a la paz social” en la hermana república, pero mientras tanto la inmigración no regulada está haciendo añicos el orden en las ciudades y el respeto a la autoridad.

4. Empleos que gustan a pesar de... Hoy comienzan las entrevistas a candidatos a jueces para el Tribunal Superior Electoral y la Suprema Corte de Justicia. Aunque ambas instituciones están “desacreditadas”, sobra el interés por “ayudarlas a levantarse”. ¡Ah, sueldos y pensiones que hacen cosas!  atejada@diariolibre.com