Diario Libre (Republica Dominicana)
Talco mortífero
Desde el ángulo económico se está ante un caso que afecta a un producto y a una compañía de larga presencia en el mercado
El ambiente en que alguien pasa su niñez se queda grabado en su memoria. Los recuerdos de las casas en que vivió, las comidas que consumía, los vecinos y amigos que tenía, las calles por las que andaba y los sonidos del entorno, le acompañarán en su vida adulta, aunque ellos no sean todos agradables y desee olvidar algunos.
Hay productos que también forman parte de esas vivencias. Y entre ellos los hay tan aparentemente seguros como para estar por encima de cualquier sospecha. De ellos no se espera ningún perjuicio, y su uso se pasa de padres a hijos, de una generación a otra. Uno de esos productos es el polvo de talco. Utilizado por las madres dominicanas de modo habitual, se le encuentra en la mayoría de nuestros hogares.
Pero ocurre que el talco de la conocida marca Johnson & Johnson, ampliamente conocida aquí, puede que no sea tan benigno e inocuo como se creía ser. Se le acusa de provocar cáncer en mujeres por causa de su empleo prolongado, alegato que la empresa describe como una especula- ción basada en argumentos sin fundamentos científicos.
Desde el ángulo económico se está ante un caso que afecta un producto y una compañía de larga presencia en el mercado. Inicialmente se vio a las demandas como una forma de aprovechar la actitud de una corte estatal en San Luis, Missouri, inclinada a favorecer reclamos de consumidores. En efecto, el primer veredicto en contra de la empresa fue por US$72 millones en febrero del año pasado, y otras tres decisiones de esa corte elevaron el total otorgado a US$307 millones. Ahora, sin embargo, una corte de California falló a favor de un demandante por un monto de US$417 millones. Y se estima en cerca de 4,800 el número de litigios pendientes en diversas jurisdicciones.
Confiada en que los reclamos no prosperarían, la empresa no ha creado reservas de contingencia con ese fin. Pero el futuro parece incierto y el daño a su imagen aumentará si las demandas continúan.