Diario Libre (Republica Dominicana)
La alteración de la glándula tiroides aumenta el riesgo cardiovascular
La tiroides es la glándula endocrina que está situada justo arriba de la tráquea y que produce las hormonas tiroideas (la tiroxina o T4 y la triyodotironina o T3), encargadas de regular todas las actividades que componen el metabolismo de nuestro cuerpo, incluyendo la velocidad con la que se queman calorías y el ritmo al que late el corazón. Una tiroides demasiado activa produce más hormonas de las que el cuerpo necesita, proceso que se conoce como hipertiroidismo.
Por el contrario, una glándula tiroides que no sea lo suficientemente activa desarrolla hipotiroidismo. Las hormonas tiroideas tienen efectos directos sobre el sistema cardiovascular. Recientes estudios asocian la alteración de estas glándulas (hipotiroidismo o hipertiroidismo) con un mayor riesgo de arritmias y muerte cardiovascular.
Sufrir hipertiroidismo conlleva un mayor riesgo de desarrollar fibrilación auricular (FA) (arritmia mas común en ancianos, así lo indica una investigación llevada a cabo por investigadores del Hospital Universitario Gentofte en Hellerup (Dinamarca) y publicado en la revista British Medical Journal (BMJ). Este trastorno hace que el latido del corazón sea mucho más rápido (taquicardia), pudiendo desarrollar una arritmia, especialmente en personas de edad avanzada. También es común que se dispare la presión arterial, y aumenta su sudoración, pérdida de peso, nerviosismo, ansiedad, insomnio, irritabilidad y cambios de carácter.
Recientemente se ha publicado un estudio en el Journal of the Amercian College of Cardiology (JACC), donde se demuestra la relación existente entre el hipotiroidismo subclínico y mortalidad cardiovascular. Esta alteración por deficiencia de hormonas tiroideas produce un descenso de la presión arterial, bradicardia, es decir, hace que el latido del corazón sea más lento de lo normal. Además favorece el aumento de peso y la retención de líquidos, ya que el metabolismo no quema calorías a un ritmo adecuado, propiciando una sensación de cansancio. Si el hipotiroidismo no es tratado, puede causar una insuficiencia cardíaca.
La detección temprana y el tratamiento efectivo de los pacientes que sufren una disfunción tiroidea es esencial para mejorar su pronóstico cardiovascular.
El trabajo cooperativo entre endocrinólogos y cardiólogos es muchas veces necesario.
¡Cuida de ti y de los tuyos!