Los vecinos no quieren hablar

En el sector donde vivía la adolescente con su abuela, Sabana Perdida, en Santo Domingo Norte, los vecinos quieren hablar poco con la prensa sobre el suceso y la vida de la Kimberly Adón.

Ayer tarde Diario Libre visitó de nuevo el sector para conocer la impresión de los familiares luego de que el Inacif ofreciera el informe sobre la muerte de la menor, pero varias personas al notar la presencia del vehículo de prensa en el lugar cerraron sus puertas. Otras prefirieron no hablar sobre el tema.

Sólo una persona accedió a intercambiar algunas palabras y entre las que dijo es que la abuela de la menor, con quien residía allí, no ha vuelto desde la tragedia y que la señora está en el populoso sector de Gualey con el padre de la menor.

En la pared frontal de la casa donde residía se puede leer un letrero “Vive Kimberlin, Vive, Vive”.

Se recuerda que los vecinos denunciaron hace varios días que familiares de los jóvenes a quienes se acusa de la muerte de la dama los estaban amenazando ante su pedido de que se haga justicia y su incredulidad a que la adolescente haya muerto como dijeron sus acompañantes en un accidente de tránsito como en efecto fue certificado ayer por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses.