Diario Libre (Republica Dominicana)
Sensatez en la crítica y en el elogio
Ya no existen dudas en materia de educación y en el campo laboral de que se consigue más alabando que criticando, pero ese no parece ser el criterio que domina a los que comentan en la prensa diaria dominicana.
Cuando se revisan los comentarios de las noticias en los portales digitales de los medios, aparecen muy pocos correos motivando al que está cumpliendo (y la mayoría de los que aparecen son de voceros pagados, otra enfermedad del sistema), y casi todos criticando el esfuerzo hecho, muchas veces comparándolo con otra carencia.
Un ejemplo: se inaugura una obra, y la mayoría de los comentarios se refieren a cuánto se robaron, o que por qué no hicieron esa obra en otro lugar que la necesitaba más, etc.
Y esto no se limita al sector público, pues hasta las obras de bien que realizan fundaciones y personalidades son criticadas bajo los mismos fundamentos.
La crítica es consustancial con el sistema democrático, pero la crítica fundamentada, no la que rumia malquerencias por antipatía personal o política, sin aceptar lo bueno que podría tener una situación.
Un dicho en los monasterios rezaba que “el abad debe elogiar mucho y criticar poco”, porque se consigue más con miel que con hiel.
Se ha dicho que no existen razones objetivas para cultivar más la crítica que el elogio, y no se pide que se elogie si no es de nuestro gusto, pero parece razonable aspirar a que se muestre sensatez, tanto en la crítica como en el elogio.
Y, por supuesto, las palabras soeces no forman parte de ninguna discusión seria sobre un tema importante. atejada@diariolibre.com