Diario Libre (Republica Dominicana)
Felipe Alou y sus méritos con jugadores dominicanos inmortales
Jugó con Juan Marichal, formó a Pedro Martínez y dirigió a Vladimir Guerrero
SANTO DOMINGO. Cuando Vladimir Guerrero sea instalado en la inmortalidad del béisbol de los Estados Unidos, llevará una historia más a Felipe Rojas Alou, quien no figura como tal en ese altar pero suma la gloria de haber dirigido a dos dominicanos que alcanzaron el pedestal.
Además de ello, fue compañero de Juan Marichal, el primer dominicano que ingresó a Cooperstown en 1983.
El Panqué de Haina, mote que identificó a Felipe, tuvo 17 campañas en las Grandes Ligas, que inició con los Gigantes de San Francisco en el 1958, Cerveceros de Milwaukee, Bravos de Atlanta, Atléticos de Oakland; Yankees de Nueva York, Expos de Montreal y en las cuales promedió .286 de average con 852 carreras empujadas y 206 cuadrangulares.
Juan Marichal llegó a los Gigantes en el 1960 y permanece hasta el 1968; Felipe inicia con los Gigantes en el 1958 y concluye en el 1963 para jugar por tres años con quien se convierte en el primer dominicano en llegar al Salón de la Fama de Cooperstown.
En los Expos de Montreal fue el dirigente de Pedro Martínez, segundo dominicano que llegó a la inmortalidad, y de Guerrero quien ha mantenido el por ciento requerido en la medida que se conocen la votaciones.
Felipe es inmortal en Canadá, precisamente por su historia con los Expos; que bajo su dirección se coronaron en la Liga Nacional en la temporada de 1994, año en una huelga paralizó el béisbol de los Estados Unidos.
La herencia de Felipe no se limita a Cooperstown. Los Leones del Escogido han sido exitosos en las ultimas campañas bajo la gerencia de su hijo Moisés, quien tiene los bonos altos en los Padres de San Diego, y la dirigencia de su también vástago Luis Rojas, que tiene a su hermano Felipe como coach de primera base.