Diario Libre (Republica Dominicana)
Solo: A Star Wars Story
Una vez más regresamos a la muy, muy lejana galaxia creada por George Lucas gracias a “Solo: A Star Wars Story”, película dirigida por Ron Howard y protagonizada por Alden Ehrenreich, Woody Harrelson, Donald Glover y Emilia Clarke. En esta precuela (cuya historia ocurre alrededor de 10 años antes de los eventos de “Star Wars: Episodio IV - A New Hope”) vemos el origen de Han Solo, descubrimos cómo se involucra en una aventura en el inframundo criminal en la que conoce a su futuro copiloto Chewbacca y cuando se encuentra con Lando Calrissian, años antes de que Solo se convirtiera en el antihéroe que se une a la Rebelión. La historia en sí de la película es entretenida y se alinea muy bien con la continuidad de Star Wars, pero no ofrece muchas sorpresas, hay algunas fallas en la trama y a veces también es predecible, y peor aun, algunos de los diálogos pueden sonar cursis o ser obvias referencias a la importancia de ciertos acontecimientos. Las actuaciones están bien, especialmente las de Ehrenreich y Glover quienes, a pesar de tener la presión de interpretar personajes icónicos encarnados por Harrison Ford y Billy Dee Williams, hacen un buen trabajo al dar vida a las versiones más jóvenes (y con menos experiencia) de Solo y Calrissian. Como es de esperarse de una película de Star Wars, visualmente “Solo: A Star Wars Story” está muy bien realizada y se nota especialmente en los nuevos mundos que muestra.
Contar el origen de Han Solo en realidad no era necesario y de la saga completa de Star Wars esta película es una de las que menos sobresalen, pero por lo menos puede ofrecer una experiencia muy divertida en una sala de cine, y deja la puerta abierta para que puedan continuar las aventuras de un joven Han Solo.