Diario Libre (Republica Dominicana)
#DL EN MUNDIAL RUSSIA 2018
La Canarinha, que despachó a Serbia, no termina de carburar Corea del Sur salvó a los aztecas de un ridículo mayúsculo
MOSCÚ. ¿Qué les pasa a los grandes en esta Copa Mundial? ¿Alguien que dé un golpe de autoridad?
Sin convencer por tercer partido consecutivo, Brasil certificó ayer su pase a los octavos de final con una victoria 2-0 sobre Serbia.
El gol de Paulinho a los 36 minutos, tras un quirúrgico pase de Philippe Coutinho, iluminó el camino del triunfo. Thiago Silva puso el 2-0 a los 68, elevándose frente al marco para cabecear un córner de Neymar.
Brasil se apoderó del primer puesto en el Grupo E con siete puntos y sacó cita para un enfrentamiento contra México en Samara el próximo lunes. Suiza cerró segunda en la llave con cinco unidades, luego de empatar 2-2 con Costa Rica, y será rival de Suecia en la siguiente tanda, en San Petersburgo.
Aliviado por solventar la primera ronda, el técnico Tite destacó la sobriedad y consistencia de su Brasil, de todo el plantel. Nada del ‘jogo bonito’ o depender de una individualidad.
Horas después de que la campeona vigente Alemania fue eliminada y de que Argentina se clasificó tras agonizar, Brasil pasó aprietos para imponer su jerarquía y su clase ante un rival voluntarioso pero con carencias. España, Francia y Portugal, otras selecciones llamadas a ser las grandes protagonistas en Rusia, tampoco acaban de despegar
Tras su paso arrollador para ganar las eliminatorias sudamericanas, las dificultades de Brasil no se entienden.
Hasta ahora, Neymar, Coutinho y Gabriel Jesús cautivan con sus regates. Pero a la Verdeamarela le falta vértigo y ser menos previsible para definir los partidos.
Un México bipolar
Dos partidos notables en el comienzo del Mundial ilusionaron de nuevo a los jugadores y aficionados de México. La goleada sufrida ayer ante Suecia (3-0) recordó a todos que el Tri de Juan Carlos Osorio lleva casi tres años siendo un equipo bipolar.
Los aztecas avanzaron solo porque una increíble Corea del Sur venció 2-0 a Alemania, que requería ganar y quedó humillada.
Lo que apareció ayer en Ekaterimburgo fue el otro México, algo inconcebible si se toma en cuenta que Osorio envió a la cancha a los mismos hombres que habían enfrentado a Corea. Fue, de hecho, la primera vez que el estratega colombiano repitió la alineación de un partido anterior desde que tomó las riendas en 2015.