Empaques genéricos

Puede discutirse cuán efectivo es el empaque genérico para disuadir el consumo

La República Dominicana y otros exportadores sufrieron un revés en la Organización Mundial de Comercio. La oposición que presentaron contra una ley australiana que requiere que los productos de tabaco sean empacados de forma genérica, con impactantes advertencias acerca de sus efectos nocivos para la salud, fue rechazada por el panel que conocía el caso desde hace cuatro años.

El objetivo de la oposición no era tanto el mercado australiano, sino evitar que disposiciones similares fuesen aplicadas por otras naciones. Dado que el propósito de la ley era reducir el consumo de tabaco, su propagación a mercados más importantes podía provocar pérdidas significativas a los exportadores. En efecto, después de Australia han seguido otros países como Francia, el Reino Unido, Nueva Zelanda, Noruega, Irlanda y Hungría, y hay más en camino.

Los exportadores no estuvieron solos. La corporación Philip Morris llevó el caso a una corte de arbitraje en base a un acuerdo comercial de Australia con Hong Kong, y la batalla legal de seis años costó al gobierno australiano cerca de 40 millones de dólares.

Puede discutirse cuán efectivo es el empaque genérico para disuadir el consumo. Philip Morris alegó que simplemente trasladaría el consumo desde las marcas de primera a marcas más baratas, y que estimularía la falsificación de productos. Pero sea cual sea su efecto, su introducción es una pesadilla para el mercadeo de cualquier artículo. De hecho, otros productores, entre ellos fabricantes de golosinas y bebidas azucaradas, han estado atentos al caso, temerosos de que se les aplique algo parecido a ellos también.

La Organización Mundial de la Salud respaldó al gobierno australiano, y está dando los pasos para implementar un protocolo internacional dirigido a eliminar el comercio ilícito de tabaco y sus derivados. A fines de junio pasado, el protocolo alcanzó las 40 ratificaciones requeridas para entrar en vigor 90 días después.