A José Ureña llámale tonto o desfasado, pero jamás cobarde

La reacción de condena ha sido brutal para el pitcher dominicano de los Marlins

SANTO DOMINGO. A José Ureña, con récord de 3-12, 4.24 de efectividad, 6 juegos de suspensión, y multado con una cifra no revelada, le han caído encima como una jauría humana. Lo han declarado enemigo público número uno, un mal que debe ser exterminado o en el mejor de los casos alejado del béisbol por un buen tiempo.

Cobarde, así lo acusan escritores, comentaristas y peloteros por igual, como si fuera un criminal que cometió su acto con una alevosía despreciable. La reacción de condena ha sido brutal, tan dura como debe haber sentido el pelotazo Ronald Acuña Jr. Afirma Ureña que su intención era separar del plato al pelotero más caliente desde el 1 de agosto a la fecha.

Puede ser pasado de moda -por aquello del béisbol de ojo por ojo y diente por diente-, exponente de una vieja y absurda filosofía de que si me pegó un jonrón, para la próxima le daré un pelotazo. En este béisbol sabermétrico e impoluto esa escuela de pensamiento no tiene cabida. No le llames nunca cobarde ni taimado. Si crees que él es un cobarde, entonces no le conoces.

Cortos: Los Medias Rojas inhabilitan a Rafael Devers; Ian Kinsler activado... Dereck Rodríguez ingresa a la lista de lesionados de Gigantes ... Joey Votto a la lista de lesionados de los Rojos de Cincinnati.

AP ↑ José Ureña y su reclamo de inocencia encontrará ecos vacíos.