Impotencia y cólera de los beneficiarios de pensiones de sobrevivencia.

“Es más la sal que el chivo”, dice una viuda que tiene 6 años en el proceso

SANTO DOMINGO. Una mezcla de impotencia y cólera es lo que generan las trabas que las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) les ponen a los deudos beneficiarios de una pensión de sobrevivencia.

En la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social (DIDA) reposan cientos de expedientes con quejas sobre esa situación.

Uno de esos casos es el de una viuda que tiene seis años reclamando una pensión de sobrevivencia que hasta el 2012 era de RD$ 45,000, pero en el proceso burocrático ha gastado más de RD$ 25,000 y aún no sabe si recibirá el dinero que por ley le corresponde y que le quedaría reducido en algo más de RD$ 20,000, descontando lo que ha gastado.

La mujer, quien pidió reserva de su nombre, por razones de seguridad, contó que su esposo falleció en el 2011 y que ignoraba que ella y sus tres hijas, menores de edad en ese entonces, tenían derecho a reclamar ante la AFP los fondos acumulados por su esposo en la Cuenta de Capitalización Individual (CCI). Cuando el cónyuge falleció vivían en San Juan de la Maguana.

Cuenta que a principios del 2012 se acercó a la AFP donde están los fondos y que le dijeron que debía llevar testigos de que avalaran la unión, además de las actas de matrimonio, las de las hijas, la de defunción y una carta de un abogado notario.

En ese proceso gastó RD$10,000 y la solicitud fue declinada, porque supuestamente no llenó todos los requisitos.

Pasaron varios años y hace tres meses le contactaron y le informaron que el caso fue retomado, pero tuvo que repetir todo el proceso, además de ir a la DGII y pagar 3% en el Banco de Reservas del monto que tiene acumulado. En eso gastó más del doble de dinero que la primera vez, porque los costos aumentaron. Aún espera una respuesta de su AFP.

Trámite de pensiones.