Periodistas en tiempos de pandemia

Al Ministro de Salud se le están reconociendo grandes méritos. Sus boletines, pronunciados con claridad y en un tono asertivo y agradable, han ayudado a transmitir credibilidad a un gobierno sobrepasado por un problema más grande que la propia pandemia: la crisis económica que camina junto al coronavirus y que acelera el paso.

El ministro de Salud da una rueda de prensa a continuación del boletín. Para participar, los medios tienen que rogar y pedir turno. Unas veces tienen suerte y lo consiguen, otras no. Se entiende que el tiempo no es ilimitado. Pero... (siempre hay un pero) el ministro acabada la rueda de prensa a veces va a programas de periodistas amigos y ahí se explaya durante todo el tiempo que haga falta.

En todas partes el coronavirus enfrenta al poder con la prensa. Es una batalla por la verdad, como siempre, como en otras etapas, solo que ahora hay miedo a morir.

Con todo, a pesar de los Putin, Trump, Sánchez, Maduro o Bolsonaro (cada uno con sus periodistas de cabecera y periodistas castigados) en esta crisis planetaria los medios de comunicación se están fortaleciendo en algunas variables. La credibilidad de los profesionales frente a los bulos, manipulaciones, rumores o directamente mentiras que circulan por todas partes ha revalorizado esta profesión que aquí, mañana, celebra el Día del Periodista.

El futuro de la profesión es tan incierto como el de todos. ¿Qué sector sabe en qué pie estará parado cuando esto pase? ¿Quién tendrá empleo, quién habrá salvado su empresa? ¿Qué va a pasar con el turismo, con el curso escolar, la industria, las pymes? ¿Con cada uno de nosotros?

No se sabe; pero lo que es seguro es que siempre habrá periodistas para contarlo.