El mensaje de la madre del atleta

SD. Christopher Melenciano pasó de repente del anonimato a convertirse en una figura que marcará un antes y un después en el deporte dominicano, luego de ganar dos medallas en los Juegos Sordolímpicos, celebrados en Caxias do Sul, Brasil.

Melenciano es un atleta que se entrena bajo la dirección de Yaseen Pérez, quien también es el técnico de la también doble medallista olímpica, Marileidy Paulino.

¿Podrá Melenciano competir en competencias convencionales?

Sin dudas que sí. “De hecho lo hace y estará en el campeonato nacional de atletismo”, dijo su entrenador.

La madre de Melenciano, Marisol Reyes, envió un mensaje a los que tienen una situación similar a su hijo. “Quiero mandar un mensaje positivo de que se puede. No importa, no hay límites”, dijo Reyes. Su esposo Domingo Melenciano y su hijo Brian Melenciano también asistieron al acto realizado en el AILA.

Melenciano participó en los Juegos Sordolímpicos en Caxias do Sul, Brasil (mayo, 1-15), una delegación que también incluyó a Nazari Caraballo y Xavier Ogando como atletas y a Alan Jesurum, miembro de la delegación.

El velocista, que ganó oro en los 200 metros y plata en los 400, fue recibido junto a sus compañeros en el Aeropuerto Internacional de Las Américas, tras su participación en los Juegos, de paso la primera vez que el país participa en un certamen de esta naturaleza.

El acto de recibimiento fue encabezado por por el ministro de Deportes, Francisco Camacho. “Las personas sordas en República Dominicana también pueden”, dijo Melenciano en el acto. “Ahora nuestra misión es entrenar fuerte para que este apoyo continúe y nos permita seguir alcanzando y logrando nuestras metas”, agregó.

Camacho mostró su satisfacción al recibir esta clase de atletas “que durante tantos años fueron olvidados, pero a partir de hoy saben ellos que cuentan con un presidente, cuentan con un ministerio, que no es un cliché, que es un gobierno, un ministerio, de rostro humano”.

Aseguró que estos atletas tienen garantizado que se les dará el mismo trato que recibe “cualquier miembro de las delegaciones nuestras”, dijo refiriéndose a las convencionales. 