Diario Libre (Republica Dominicana)
La crisis del canal haitiano: negociaciones trancadas y frontera abierta a la fuerza
SANTO DOMINGO. Al cruzar la puerta del 2024 y a más de tres meses y medio de que el presidente Luis Abinader anunciara el cierre de la frontera y otras medidas de protesta por la construcción de un canal que afectaría el suministro de agua del río Masacre a poblaciones dominicanas, la obra está avanzada en un 80 por ciento, según las autoridades haitianas, y el flujo de compradores del mercado binacional se ha normalizado, con la novedad del registro de los datos biométricos de este lado, pero las negociaciones entre los dos países, que no lograron alcanzar un acuerdo ni sobre el canal ni sobre la frontera, lucen trancadas.
El origen del conflicto data del año 2018 cuando los haitianos inician la construcción de la obra hidrográfica, lo que llevó a conversaciones de entendimiento que concluyeron en una declaración conjunta, el 27 mayo del 2021, en la que la República Dominicana, basada en las informaciones suministradas por los representantes de la República de Haití, expresa que “la obra iniciada en el río Dajabón o Masacre para la captación de agua no consiste en un desvío del cauce del río”.
Pero apenas cuatro días más tarde, el 31 de mayo, Abinader solicitó la paralización de la obra alegando que, efectivamente, esta desviaría el cauce del río porque requiere la construcción de un muro de contención, para ese propósito, en violación al artículo 10 del Tratado de Paz y Amistad Perpetua y Arbitraje de 1929.
Dicho tratado establece: “En razón de que ríos y otros cursos de agua nacen en el territorio de un Estado y corren por el territorio del otro o sirven de límites entre los dos Estados, ambas Altas Partes Contratantes se comprometen a no hacer ni consentir ninguna obra susceptible de mudar la corriente...”.
Al cabo de dos meses del reclamo, en julio del 2021, las gestiones del gobierno de RD lograron que se detuvieran los trabajos y se retirara la maquinaria.
No obstante, el pasado 1 de septiembre de 2023, tras la reactivación del proyecto, el conflicto escaló cuando el mandatario dominicano amenazó con suspender los visados para haitianos y cerrar la frontera. La primera medida se hizo efectiva el 11 de septiembre y la segunda el día 15 de ese mismo mes. A la par, el gobierno prometió que compraría a los productores locales las mercancías perecederas destinadas al mercado haitiano, tales como huevos, pollos, ajíes, berenjena, habichuelas y cebolla.
El peso del cierre fronterizo para ambos estados, en términos económicos, se puede medir tomando en cuenta que Haití es el tercer socio comercial de la República Dominicana, que abastece a ese país del 25 por ciento de los alimentos que consume su población. Este intercambio comercial superó los 1,000 millones de dólares en el año 2022, según datos del Centro de Exportaciones e Inversiones de República Dominicana.
El cierre
Fue el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), que encabeza Roberto Álvarez, quien emitió un comunicado justificando las medidas donde señala que el proyecto viola el tratado de 1929, el Acuerdo Fronterizo de 1935 y el Protocolo de Revisión de Frontera de 1936. Además, advierte, que los límites entre los dos países son definitivos e innegociables.
Según el documento, la obra buscaría canalizar el agua para venderla de forma privada a los agricultores haitianos, sin contar con la autorización del gobierno de ese país. “Esta iniciativa privada se está llevando a cabo entre las pirámides número 13 y 14, ubicadas entre Fuerte Libertad y Juana Méndez, y según los informes disponibles, los trabajos se están realizando de manera manual, lo que indica un carácter improvisado en la construcción”.
El MIREX añadía que el primer ministro de Haití, Ariel Henry, habría insistido en que el proyecto no era gubernamental y que envió una delegación del Ministerio de Interior de Haití a la zona para buscar una solución definitiva. “Valoramos este gesto de cooperación y confiamos en que las conversaciones en curso permitan resolver este conflicto de manera pacífica y respetando los intereses mutuos”, expresó.
Salida en masa
A raíz del cierre de la frontera, miles de haitianos empezaron a abandonar el país de manera voluntaria tal y como registran informaciones que datan de los días posteriores al anuncio. El 18 de septiembre el excónsul haitiano en República Dominicana, Edwin Paraison, calificó la crisis por el canal como la mayor relativa a la frontera en los últimos 50 años.
Ante la ONU
El conflicto se trasladó a un escenario internacional cuando tanto el presidente dominicano, Luis Abinader, como el primer ministro haitiano, Ariel Henry, intervinieron ante la 78 Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.
El primero en hablar fue Abinader, el 20 de septiembre, quien explicó que el río Dajabón nace en Loma de Cabrera y recorre 55 kilómetros hasta desembocar nuevamente en territorio dominicano en la Bahía de Manzanillo. Señaló que la obra se levanta en los dos kilómetros que el río entra en Haití y que su construcción nunca fue debatida con el Gobierno dominicano, ni se suministró documentación sobre su envergadura. También aseguró que el canal era una iniciativa de un grupito que busca lucrarse.
Dos días más tarde, el primer