Diario Libre (Republica Dominicana)
Niños y pantallas: sigue estas recomendaciones para evitar la sobreexposición
La terapeuta del lenguaje y el habla Jennifer Melo comparte sugerencias para disminuir el tiempo que los pequeños pasan frente a dispositivos electrónicos
Hoy en día, las pantallas forman parte de la vida de los niños desde temprana edad. Sin embargo, los pediatras insisten cada vez más en la necesidad de limitar el uso de televisiones, tabletas o smartphones en niños, dado que la sobreexposición puede ser perjudicial para su salud y desarrollo.
“La población infantil es la que resulta más afectada por las desventajas de la sobreexposición a las pantallas”, explica la terapeuta del lenguaje y el habla Jennifer Melo.
La profesional de Mentalmente Centro Integral de Salud Mental sostiene que la mejor forma de reducir el tiempo que pasan los niños frente a los aparatos
tecnológicos es respetando su etapa evolutiva.
Riesgos de la sobreexposición
Diversos estudios han determinado que el consumo constante de tecnologías digitales tiene efectos adversos en la salud mental de niños y adolescentes. La profesional explica que esto incluye un aumento en las probabilidades de sufrir ansiedad generalizada y social, depresión y somatizaciones después de dos años de uso constante.
En el caso específico de la niñez temprana, la exposición excesiva a las pantallas conlleva un mayor riesgo de trastornos del desarrollo, pues se trata de un periodo crítico en el desarrollo neurestricciones
ronal de los niños.
“Las habilidades del habla y lenguaje, que requieren una buena capacidad de atención, se ven afectadas cuando un infante se encuentra constantemente expuesto al celular, tableta o televisión, provocando un desarrollo lingüístico y calidad comunicativa por debajo de lo esperado para su edad”, indica la profesional.
Otros riesgos que cita la experta son:
■ Problemas visuales. La exposición prolongada a pantallas puede contribuir a fatiga visual, sequedad ocular y otros problemas visuales.
■ Problemas de sueño. La luz azul emitida por las pantallas puede afectar la producción de melatonina, una hormona clave para el sueño. ■ Problemas de desarrollo cognitivo. La sobreexposición puede limitar el tiempo dedicado a actividades que fomentan el desarrollo cognitivo, como el juego creativo, la lectura y la resolución de problemas. ■ Problemas de dependencia. Los niños pueden desarrollar una dependencia tecnológica, haciéndolos menos propensos a participar en actividades al aire libre y sociales.
■ Problemas de autoimagen. La exposición constante a imágenes idealizadas en las redes sociales y otros medios puede influir en la autoimagen y la autoestima de los niños.
Qué hacer
Para disminuir el tiempo que los niños pasan frente a las pantallas, Melo aconseja a los padres, en primer lugar, predicar con el ejemplo e incentivar a sus hijos a tener contacto real con las personas y la naturaleza.
A continuación, la experta ofrece nueve recomendaciones para controlar el uso de las pantallas:
los dispositivos electrónicos en las habitaciones de los niños y no utilizar las pantallas como medio de castigo o recompensa.
controles parentales para monitorear el contenido que se consume o descarga y establecer
de tiempo.
áreas en el hogar donde no se permite el uso de dispositivos electrónicos.
juguetes y actividades que estimulen la creatividad y la imaginación, promoviendo formas de entretenimiento sin pantallas.
la lectura de libros físicos. Establecer momentos regulares para la lectura en familia.
las interacciones sociales cara a cara. Organizar juegos de mesa, actividades familiares o salidas para pasar tiempo juntos.
a los niños sobre la importancia de consumir contenido apropiado para su edad y cómo tomar decisiones saludables en línea.
rutinas claras que incluyan tiempo para la tarea, actividades al aire libre, tiempo en familia y momentos de pantalla. Las rutinas brindan estructura y previsibilidad.
a los niños en la discusión sobre las reglas relacionadas con el tiempo de pantalla.
Desde los 24 meses hasta los cinco años, lo ideal es limitar el tiempo de tabletas y TV a una hora al día y evitar el uso de celulares, también en compañía de adultos.