Diario Libre (Republica Dominicana)
En principio, Ibai Gómez solo estaría con la sub-23 en los Juegos Olímpicos
Al nuevo DT se le habría prometido hasta la absoluta, pero todo está abierto
SANTO DOMINGO. Ibai Gómez no ha pisado suelo dominicano para comenzar su trabajo en el terreno con el grupo que irá a los Juegos Olímpicos de París, pero el diario deportivo español Relevo ha sacado una nota que no solo da pinceladas de la hoja de ruta del técnico con el plantel, sino que deja grandes interrogantes sobre esta nueva aventura de la Fedofútbol.
Según el medio digital, Rubén García, titular de la Federación Dominicana de Fútbol, encomendó hace seis meses al exjugador Rony Beard (que sirve de enlace en España) identificar a un entrenador en suelo ibérico.
Gómez encajó en el perfil, si bien recién inicia su carrera como técnico y apenas tiene experiencia a nivel juvenil, que no prevé abandonar con el equipo Santutxu. Una vez se le ofreció el cargó comenzó un levantamiento donde identificó a un grupo de jugadores de ascendencia dominicana como Peter Federico, Edgar Pujol, José de León y Óscar Ureña.
El atractivo que ofrece a esas joyas es que, como el torneo olímpico es sub-23, si eventualmente evolucionan y son llamados por la absoluta de su país no tendrían problema. Una idea que choca con el proceso de esa selección que en Honduras logró el boleto al Mundial sub-20 y los Olímpicos con 14 de los jugadores formados Quisqueya.
Con Junior Firpo prácticamente confirmado, ahora van tras otros, descartado de entrada a Mariano Díaz. El contrato sería solo para París 2024, “pero si la cosa va bien, estaría sobre la mesa la opción de continuar incluso con la absoluta”, menciona el medio.
en
Un detalla que puede caer como una bomba en el entorno de Marcelo Neveleff, al frente de la selección desde enero de 2023 y que trabaja en la conformación del grupo que disputará en junio los primeros dos partidos de las eliminatorias para la Copa del Mundo 2026.
bLiverpool es uno de esos lugares especiales que el mundo tiene como referencia para que la humanidad mire hacia allá con particular admiración. De entre sus rincones, salió la inspiración que forjó la creación de los Beatles, y después de ellos, la música no volvió a sentirse igual. Una ciudad tan melódica como futbolera, hogar de uno de los equipos más tradicionales y emblemáticos que existen en el mundo, el Liverpool FC.
Este club, que por su palmarés y su esencia genera mucha afición también fuera de Inglaterra, vive un presente marcado de una especial emotividad: su entrenador, el alemán Jürgen Klopp, anunció hace un mes que abandonará el cargo al final de esta temporada, puesto que asumió en aquel inolvidable octubre de 2015. En estos casi nueve años al frente del banquillo de Anfield Road, el éxito lo ha acompañado, pues, desde su llegada, el Liverpool ha vuelto a ser uno de los mejores de Europa.
El domingo pasado jugaron la final de la Copa de la Liga ante el Chelsea en un estadio de Wembley que contó con el colorido y el ambiente propio de un partido de definición de campeonato. Un encuentro vibrante que se definió en la prolongación. Después de un cero a cero que parecía invariable, el capitán Virgil Van Dijk anotó el tanto de la victoria, sumando así el título número setenta y dos para el Liverpool, entre torneos locales e internacionales.
Un triunfo que le da más vigencia que nunca al relato de Klopp, tipo vibrante, con un carácter que contagia, poseedor de un liderazgo que transmite confianza, cariño, pero también disciplina y rigor. En la rueda de prensa post partido, manifestó que fácil podría ser el título más especial de su carrera. Y es que tuvo mucho de épico, ya que ante las bajas de hombres importantes por lesión, no dudó en apostar por los Elliott, Bradley, Clark, Danns, Mcdonnell, parte de las promesas del centro de formación del club, jóvenes menores de veinte años que el domingo supieron cumplir.
Resulta difícil caer en cuenta que estamos viviendo los últimos meses de una etapa única e irrepetible, años en los que Jürgen Klopp ha hecho todavía más rica la historia de un Liverpool que todavía esta temporada tiene como objetivo la FA Cup, la Europa League y la Premier, que de concretarse ensancharían aún más a esta leyenda, que se está despidiendo por la puerta grande.
b