Betances le dijo no a EE.UU. por jugar para RD
un niño venía a República Dominicana a pasarse unos veranos en los que nunca faltaron los días de ríos y de montear. “Claro, uno se iba a tirar piedras”, respondió cuando se le preguntó si hubo jornadas de maroteos. “Así era que uno fortalecía el brazo”, agregó.
Esa rutina fue interrumpida cuando tenía 14 o 15 años porque empezó a jugar béisbol en Nueva York, aunque luego la retomó tras cumplir los 20.
Desde hace cuatro años, ya como pelotero profesional, él ha repetido ese viejo ritual, pero no en versión paseo. “Tengo ya cuatro años yendo en enero a prepararme. Duro entre tres semanas y un mes”, apuntó el derecho. “Ahora, por ejemplo, estuve allá y me preparó Chiqui Mejía en Bonao. Le tiré a bateadores en vivo”. Esta última parte es importante si se toma en cuenta que Betances se integró el sábado a los entrenamientos de los Yankees y que el Clásico Mundial está al doblar de la esquina.
Esto puede que sea cierta ventaja para el lanzador dominicano, amén de que viene de una temporada en la que lanzó 73 entradas y toleró 54 imparables (3.08) “He preparado el brazo más temprano que en los últimos años”, afirmó. “Ahora estoy en un 80, 85%. Voy a tratar de lanzar aunque sea tres o cuatro juegos antes de que me una al equipo dominicano para el Clásico”. Betances sostuvo que está muy emocionado de jugar con el equipo dominicano y dejó claro que no tendrá ningún inconveniente en ocupar el rol que el dirigente Tony Peña le asigne dentro del equipo. Es precisamente con Peña, coach de los Yankees, con quien mantiene una constante comunicación en torno al evento mundialista, además de conversar sobre el particular con Robinson Canó y Manny Machado, otros dos miembros de la escuadra quisqueyana.