Los Guandules, barrio de jóvenes progresistas
Las diferentes organizaciones promueven el pensamiento crítico en los adolescentes y forman en áreas como la política y las artes
Aportar a la construcción de una sociedad con más democracia, donde el capital joven comprenda sus circunstancias para poder mejorarlas constantemente, es el principal objetivo de las diferentes organizaciones comunitarias del barrio Los Guandules.
Con una población de más de 30 mil personas que oscilan entre los 12 y 64 años, según un censo del año pasado del Comité de Salud de Los Guandules, este barrio se caracteriza por tener jóvenes creativos y decididos, que buscan aprovechar el potencial de la educación para el desarrollo.
El dirigente comunitario Jerson Batista, presidente de la Coordinadora de Organización para el Desarrollo de Los Guandules (Coodegua), asegura que las diferentes organizaciones y clubes que hacen vida en el barrio “se esfuerzan para que siempre avancemos y mejoremos como comunidad. Se nota cuando hablas con algunos jóvenes, porque su forma de pensar ha cambiado mucho, y son en quienes nos enfocamos para trabajar”.
“Existen espacios en varios puntos de Los Guandules que se dedican a formarlos en diferentes áreas, los que a través de nuestra organización gestionamos y organizamos, para que aprovechen la oportunidad de conocer cosas nuevas, que les sirven para ser mejores”, explica en ese orden Batista.
Coodegua agrupa a 42 organizaciones, 20 de las cuales son juntas de vecinos, y las demás son clubes, asociaciones de amas de casa y movimientos comunitarios, unidas con un único objetivo: trabajar para que sea sostenible el bienestar de todos los que habitan allí.
“Entre todos, siempre dando participación a cada uno, aportemos con ideas y proyectos, muchos enfocados en los jóvenes, en su educación y otros temas. Lo que más nos enorgullece es que la mayoría de participantes son muchachos que quieren salir adelante, con inquietudes y ganas de aportar con lo que saben”, destaca.
Una de las organizaciones que más ha aportado a la juventud de Los Guandules es asimismo el Comité de la Defensa de los Derechos Barriales (Copadeba), cuyo representante en el barrio es Reynaldo Brioso, quien con su ingenio ha transmitido su motivación por el desarrollo social a los adolescentes.
Brioso considera que “la formación política para los jóvenes es el recurso más valioso si se quiere una sociedad con una
Víctor Crouset Los Guandules tiene gente luchadora, con sentido de solidaridad, que le gusta ayudar en todo momento”.
Freddy Betances Todavía permanecemos con nuestras buenas costumbres, a pesar de todo, porque es lo que somos”.
democracia verdadera, donde la igualdad de derechos prime sobre todas las cosas”.
“Los jóvenes deben ser tomados más en cuenta para la creación de políticas públicas. Lo que hacemos es brindarles a los nuestros formación realmente para el futuro, para que conozcan su identidad y realidad, además reconozcan el valor de la participación política a temprana edad”, argumenta el también dirigente juvenil.
Actualmente Copadeba trabaja con 30 adolescentes en el programa “Yo Transformo”, que contempla áreas como la construcción de géneros, la democracia, el liderazgo, entre otros temas, cuyo impacto ya se ha comenzado a notar.
“Tratamos de valorar esos pequeños cambios, que son los más importantes, para que nuestro barrio siga mejorando.
Se puede percibir en el cambio de pensamiento de los jóvenes o en su nueva forma de actuar. Además, estos espacios han sacado lo mejor de ellos, ya que algunos han descubierto su pasión por el canto, la escritura, o la política en estos espacios”, expone al respecto.
Copadeba también ha lanzado la Escuela de Formación Social y Política Mama Tingó, donde se profundiza en temas políticos y el funcionamiento de la sociedad y los gobiernos. “Si no nos involucramos más en la política como fuerza nueva, no veremos cosas diferentes, porque depende mucho de nuestra voluntad como jóvenes y las ideas que tenemos”, manifiesta Brioso.
Destaca que lo mejor de los jóvenes de Los Guandules es que ya están dejando de ver la política como algo ajeno a ellos. Se nota su interés por involucrarse en la toma de decisiones, en manifestar sus ideas y opiniones de una forma más franca y sin temor.
“Todos esos jóvenes comienzan a hacer amistad cuando se reúnen e intercambian sus ideas, se promueve un grupo más humanizado. Trabajan por la comunidad, comienzan a cuestionar la realidad, los temas políticos y los actos de corrupción que se dan. Empiezan a cuestionar todo, eso va creando un impacto”, comenta.
Afirma que la formación para los jóvenes de Los Guandules es importante porque implica que estos participen de forma efectiva con los demás actores en el desarrollo de la comunidad, además de que estimula la consolidación de grupos que se comprometen con su barrio y con las necesidades de la gente”.
“Ellos adquieren habilidades para la vida, desarrollan una postura crítica y ética frente al mundo y al grupo, a partir de las habilidades del pensamiento que permiten aprender e interpretar la realidad”, puntualiza.
Destaca asimismo que esta participación se basa en el desarrollo de valores, actitudes y práctica que se comparten, y que logran una mejor calidad de vida no solo en la comunidad, sino también en el
país. Uno de esos j óvenes es Kiweny Montero, un amante de la música con apenas 18 años. Formó parte de “Yo Transformo”, y asegura que fue la mejor experiencia de su vida, donde conoció “mejor el funcionamiento de la política, cómo surge la pobreza, y, además, cómo salir de ella. Después de ese encuentro veo las cosas muy diferentes”.
Cultura y deporte
Otro de los espacios que también aportan al desarrollo de los jóvenes es el Club Los Compadres, que desde su fundación en el 1967 ha brindado educación cultural en áreas como el canto, el baile y la formación de instrumentistas.
En este espacio decenas de niños y jóvenes se reúnen todas las semanas para ensayar con sus instrumentos y vestuarios, para realizar actividades culturales en diferentes puntos del país, o participar en concursos.
Benito Luciano, secretario general del club y director del Ballet Folklórico Tierra Taína, que ha representado el país en Puerto Rico, Martinica y Guadalupe en festivales, explicó que el espacio también es utilizado para impartir charlas sobre medio ambiente, desechos sólidos, y contaminación ambiental. También acogen los participantes del programa Progresando. A nivel deportivo han competido en juegos interbarriales, en los cuales han obtenido importantes posiciones.
“Desde hace diez años doy lo mejor de mí para que todos los niños y los jóvenes encuentren otro camino, que vean la cultura con valor, y entiendan lo bueno que es aprovechar estas actividades”, afirma.
Historia
El barrio, establecido en el Distrito Nacional, específicamente en la margen occidental del río Ozama, y con una extensión territorial de 0.895 km2, se comenzó a construir alrededor de una coyuntura matizada por procesos de desalojo, iniciados por el tirano Rafael Leónidas Trujillo, en el hoy Ensanche Luperón, y continuados por los gobiernos posteriores, es así como en el 1948 se va tejiendo un espacio social propio de los barrios capitalinos de la periferia, lugar donde se establecieron sus primeros habitantes principalmente del campo.
Su nombre se debe a la cantidad de malezas, hierbas y tierras sembradas de leguminosas, o guandules. Antes de Trujillo comprar y decretar este terreno de utilidad pública e interés social, era propiedad de la familia Vicini, según cuentan sus moradores.
En los años del 1960 el barrio se estabiliza e inicia el proceso de formación de su identidad y de crecimiento, luego en 1965 se da a conocer por su participación activa en la Guerra de Abril. En 1966 es víctima de la represión durante el conocido periodo de los 12 años del gobierno de Joaquín Balaguer y es solo un año después a este, en el 1967, cuando se inicia la construcción de la avenida principal, el puente y los multifamiliares, particulares estructuras que se encuentran en la entrada. La avenida Francisco del Rosario Sánchez es la principal del sector, considerada el centro comercial del barrio, allí radica uno de los pilares del sector en cuanto a economía se refiere, que es el mercadito.