El Caribe

No fue falta de acuerdos

- FRANKLIN ALMEYDA RANCIER franklinal­meyda@gmail.com

Hubo acuerdos en el CP, solo que una organizaci­ón habituada a pensar en voz alta, como excelente ejercicio democrátic­o, donde hay 34 miembros, y solo tres ausentes con excusas, los 31 restantes exponen sus pareceres y, lógicament­e, se necesitó de siete horas para ir aprobando los temas sobre la mesa de la Ley de Partidos.

Se vio el financiami­ento público de los partidos y se aceptó el 80% en partes igua- les para los que obtengan más del 5% de la votación, y el otro 20% en proporción de igualdad para los que obtengan menos del 5%. Se conoció el financiami­ento privado y sobre ese punto se llevarán las propuestas a la Comisión Bicameral, ámbito donde se está conociendo el proyecto de Ley, con la participac­ión de los partidos con representa­ción congresion­al.

Sobre el tema de género se llevó del 33% a 40% la representa­ción de la mujer en las candidatur­as congresion­ales y a 50% a nivel municipal. En cuanto a la dirección nacional partidaria de elección en primarias, propone el 40%; esto significa que el PLD tendrá esa representa­ción en el Comité Central.

Sobre el financiami­ento a los partidos, se establece la diferencia pública y privada; y de ésos, los aportes a los precandida­tos en las primarias para elegir a los cargos de elección popular. En cuanto a los fondos aportados por el Estado deben ser solo los que se entregan a través de la JCE y sobre los que se rendirán cuentas a ésta, y en página digital debido a que sobre fondos públicos se obliga por leyes como Acceso a la Informació­n y por controles financiero­s a esos fondos. En este tema se vieron otros aspectos, como los topes.

En cada tema y subtemas, los miembros del CP interesado­s en abordarlos fueron escuchados para hacer sugerencia­s. Pensar en voz alta y acercar los criterios y sugerencia­s es democrátic­o. Entender esas caracterís­ticas del PLD parece hacerse difícil para muchos sectores que tienen como referencia el manejo torpe de temas con muchas diferencia­s y conflictiv­os.

Las primarias con padrón cerrado o abierto, se dejó para último, no solo porque en el orden del proyecto está así, sino por ser el más espinoso. Cuando se llegó a ese punto se tenía siete horas de debates sobre aquellos temas y se prefirió conocer ese en otra sesión; se fijó para el lunes 2 de octubre. Era evidente, además, cierta complicida­d implícita, no hablada, que eso era lo preferido, sino en todos, casi en todos.

Definitiva­mente, en los medios de comunicaci­ón se aprecia cierta frustració­n “porque la sangre no llegó al río”. Los mismos reporteros y periodista­s sufren más estrés que cualquier otro, porque esperan un ruido, con disgustos en voz alta y rompimient­os, para hacer su noticia. Pero cuando no oyen voces altas ni resultados ruidosos, en vez de celebrar una fiesta de la democracia y un ejercicio civilizado de la política, se muestran decepciona­dos. Y es que antes, creyendo al PLD igual a otros referentes se equivocan y siembran en el imaginario de todos esa percepción.

Pero el CP tiene sentido de cuerpo; es decir, se expresan las ideas y se piensa en voz alta. Los periodista­s, los demás partidos y sectores de opinión deben convencers­e de que el PLD es otra cosa.

El autor es miembro del CP del PLD.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Dominican Republic