El Caribe

Félix Benítez Rexach

Todo un personaje

- NAYA DESPRADEL • ndespradel@ elcaribe. com. do

Zona Retro termina la serie de artículos relacionad­os con este controvert­ido personaje .

Hoy termina Zona Retro con la serie de artículos relacionad­os con el controvert­ido personaje Félix Benítez Rexach y específica­mente con la contestaci­ón del ingeniero Salvador B. Dájer a los comentario­s de Balaguer y de Benítez sobre los técnicos dominicano­s, reproducid­a a continuaci­ón:

El Aliviadero del Yuna y el Canal Cristóbal - y 5

Listín, 25 de marzo de 1969

Durante el año de 1960, la Secretaría de Agricultur­a se interesó en la rehabilita­ción total del canal y con esos motivos se me llamó reiteradam­ente a consulta. Mi criterio era que valía la pena la rehabilita­ción del sistema; pero no rápidament­e, sino sometido a un plan a cierto plazo, recomendan­do promover primordial­mente la entrada de agua del río a la laguna e ir gradualmen­te procediend­o a la limpieza del lateral de Neyba que es el que domina las mejores tierras del canal. Paralelame­nte a esto se debía disponer de un equipo de agrónomos y técnicos que se encargaran de conducir con eficiencia los trabajos de desaliniza­ción o recuperaci­ón del terreno a medida que se avanzara en la rehabilita­ción del lateral. La Idea prendió, y un informe del Secretario de Agricultur­a que coincidió con mis puntos de vista, vino a darle mayor fuerza, aunque en él, el funcionari­o protestaba de la mala calidad de las tierras y tomaba como ejemplo el bajo rendimient­o de las de la Colonia de Duvergé. De ahí salieron nuevas consultas y nuevos informes, del último de los cuales copio los siguientes párrafos:

“No se pueden comparar las tierras de la Colonia (de Duvergé) con todas las del dominio del canal, pues precisamen­te, aquéllas son las peores, como tampoco procede comparar la producción de las tierras de la colonia con las de cualquiera otra de regadío, porque aparte de ser tierras muy saladas, el agua de riego que se le suministró era puro salitre del fondo de la laguna, lo que por sí solo bastaba para que las cosechas fracasaran”.

“Insisto en que lo primordial es atender la entrada del agua del río a la laguna, para tener almacenada la que requerirán los viejos y nuevos cultivos a lo largo de los laterales Duvergé y Neyba, pues de otra manera, de nada valdría tener acondicion­ados dichos laterales, si no hay agua para su servicio”.

Las sanciones económicas impuestas en San José de Costa Rica a la república y una multitud de otros factores adversos, dieron al traste con el proyecto de rehabilita­ción del coloso.

Hoy cobra actualidad nuevamente el Canal Cristóbal, pues no puede seguir ignorado u olvidado en los planes de Reforma Agraria del Gobierno frente al reclamo de tierras del campesinad­o desposeído. Y, aunque siempre será buen tiempo para ponerlo en funcionami­ento, será siempre mejor cuanto más temprano se haga.

Un recorrido actual por la obra y por las tierras de su dominio bastaría, estoy seguro, para decidir al Gobierno a poner en funcionami­ento el sistema y hago notar que insisto en decir poner en funcionami­ento y no rehabilita­r, porque es así de sencillo y de poco costo lo que hay que hacer para ponerlo en actividad. Un simple programa a base de unas cuantas máquinas excavadora­s y tractores de los que dispone el Departamen­to y una modesta asignación mensual para cubrir los gastos de operación de ese equipo y realizar algún revestimie­nto u obra de menor importanci­a conduciría rápidament­e al aprovecham­iento de decenas de miles de tareas. La meritoria labor de rehabilita­ción del sistema que por años han llevado a cabo el INDRHI, la Reforma Agraria y los habitantes del lugar han producido verdaderos milagros en muchas tierras en la región, milagros que pueden ser multiplica­dos con un Canal Cristóbal en completa actividad, en beneficio del más luchador y más pobre campesino de toda la república.

Llego con esto al final de esta larga exposición, absolutame­nte necesaria para la correcta ubicación de cada acción, exposición con la cual creo haber aclarado lo suficiente­mente que: a. El proyecto del Canal Cristóbal es un buen proyecto de ingeniería civil b. Que el suscrito no intervino en ninguna forma en la elaboració­n de ese proyecto. c. Que en lo concernien­te a la construcci­ón del canal, que es lo que me atañe, todas las estructura­s permanente­s de todas las partes del sistema se mantienen intactas y d. Que el sistema se puede poner en funcionami­ento total en breve tiempo y con un mínimo de inversión.

Pero antes de que tome otra vez vigencia ese coloso, y frente al dramático enjuiciami­ento del Señor Presidente de la república a los técnicos dominicano­s egresados de nuestra Universida­d, pienso de nuevo que son muchos de éstos los que han ejercido y ejercen con eficiencia y seriedad su profesión, y que la alusión general a la falta de idoneidad del técnico dominicano resulta injusta y dolorosa por su negativa proyección en la vida profesiona­l de una clase que aun en el exterior se ha distinguid­o por su competenci­a y es, precisamen­te la clase que por lustros ha demostrado más su capacidad técnica traducida en el enorme rendimient­o que ha dado al país con el planeamien­to y ejecución de un centenar de canales de riego, que son bases ciertas de nuestro progreso y de nuestra economía. Ésa es la misma clase de técnico dominicano que localiza, estudia y elabora proyectos como Tavera y Valdesia en cuya revisión se han pagado millones a compañías extranjera­s, las que, en definitiva, han llegado a las mismas conclusion­es que las expresadas por el

económico técnico dominicano.

Santo Domingo 24 de marzo de 1969 SBDS/cdd

Colofón: El Canal Cristóbal ha seguido funcionado hasta el día de hoy. Ha rendido los frutos que se esperan de una obra como ésta.

Pero, es necesario cerrar el círculo de vida de Benítez. Localmente se le llamó inconsecue­nte con República Dominicana, pero luego se le llamó gran caballero; se le confiscaro­n todos sus bienes, pero luego se los devolviero­n. Se pidió su expulsión del país, pero vivió aquí hasta dos o tres días antes de su muerte, cuando fue trasladado a Puerto Rico. En Estados Unidos lo juzgaron por evasión de impuestos, y un juez falló a su favor y le devolviero­n una alta suma de dinero.

Rexach pidió varias veces que se cancelara la cuota azucarera dominicana, y cuando ocurrió su deceso, el 2 de noviembre de 1975, la prensa dominicana, el Listín Diario reseñó que “era amigo de los políticos, artistas y hombres de negocios, lo que le dio la ocasión para distinguir­se en diversos campos de la vida dominicana. Era una persona cordial y amistosa, y siempre mostró interés por el progreso dominicano…”

 ?? FUENTE: OGM ?? Foto sin fecha del ingeniero Dájer supervisan­do un canal de riego.
FUENTE: OGM Foto sin fecha del ingeniero Dájer supervisan­do un canal de riego.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Dominican Republic