Una verdad incómoda: Ahora o nunca

Filme didáctico sobre el calentamiento global. Aunque el título An Inconvenient Sequel: Truth to Power traducido literalmente sería “Una secuela incómoda: la verdad al poder”. El documental tiene como figura conductora a Al Gore, ex Vicepresidente de USA. Según algunos científicos, tendremos hasta el 2027 para evitar una gran catástrofe que puede destruir nuestro planeta generando condiciones meteorológicas agresivas, inundaciones, epidemias y olas de calor que sobrepasan todo lo que conocemos. El documental sigue la lucha de Al Gore para frenar el calentamiento global y su intento de imponer el problema, no como una cuestión política, sino un desafío global para la humanidad. Se queda a medio camino cuando dirige la atención sobre la necesidad de que esta verdad científica sea la que norme las políticas públicas y no – la clara evidencia– de que lo que prima son los intereses de las clases dominantes de los países con los mayores índices de contaminación. Obviamente, es dirigido para plateas norteamericanas con un sesgo político de tipo meramente clasista –en el sentido de que va dirigido a la clase gober- nante estadounidense–, pero que sirve para todos como discurso anti-calentamiento, puesto que los jerarcas financieros dominantes rechazan cualquier reclamo en torno a lo que consideran y tildan de falso calentamiento; y por supuesto que ese rechazo de los grandes industriales se debe a que precisamente va en vía contraria a sus intereses con llamados tales como cambios de conductas en la vida consumista como andar menos en carro, reorientar el consumo de productos hacia los no contaminantes, es decir que se dirige a conductas individuales como primicia narrativa. No obstante, los planes e intereses estratégicos de orden estatal y de gobiernos relacionados con cambios climáticos brillan por su ausencia, de ahí que no aparezca cualquier alusión al patrón capitalista de desarrollo. Hay quien vea vedetismo político de Al Gore con miras a mantener su espacio. El documental es errático cuando echa manos del cliché de que es más un problema moral que político –que es bastante incierta pues cuando USA no firmó el Protocolo de Kioto realizó una acción política–, aunque llama la atención para que se presione al gobierno. Absurdo que solo mencione posibles daños ambientales a la India, China, Europa, Japón, Estados Unidos, México… pero no a América del Sur y África (de Brasil menciona el ciclón de 2004). En lo cinematográfico decae con ese tonto montaje realidad-ficciónverdad.)

GÉNERO: Documental . DURACIÓN: 100 minutos