En esta temporada veraniega, las lámparas de techo con diseños simples y extravagantes se convierten en las protagonistas de la decoración contemporánea

que no solo sirven para dar luz a un ambiente, sino también para brindarle un carácter único y agradable. Grandes, pequeñas, clásicas o extravagantes, no importa cuál sea el tipo, las lámparas tienen ese toque que embellece cualquier espacio de la vivienda. Es importante, en este caso, tener en cuenta que a la hora de decorar con lámparas colgantes y con diseños modernos, el tamaño que se elija debe mantener un equilibrio con los demás objetos decorativos, ya que la exageración restará atractivo. Es por ello que al seleccionar una lámpara colgante, es importante tomar en cuenta el tamaño de la misma y el espacio donde se va a colocar. Cabe destacar que las lámparas más grandes y de gran diseño, son perfectas para embellecer comedores espaciosos, recibidores o esquinas a las que se les quiera añadir protagonismo.

Tipos de lámparas

El diseño de las lámparas colgantes suele ser un poco recargado, ya sea por los colores, texturas o la forma que tienen. La finalidad de este tipo de lámpara no es alumbrar la habitación, sino más bien la de decorar y armonizar el ambiente. Los colores que más se utilizan en este estilo son los cálidos, y muy poco los fríos; el dorado también entra en la composición del diseño y en menos proporción el plateado.

Entre los materiales que puedes encontrar en las colgantes, están las metálicas con cristalería, de formas geométricas. También están las hechas de cintas o pompones, que dan movimiento a la lámpara; las tejidas o de fibras naturales, y las metálicas bañadas en dorado o plateado, entre otras.

De inspiración clásica, industrial y de estética contemporánea, las lámparas con cable y bombilla a la vista también vuelven a ser protagonistas este año. De estilo industrial: estas lámparas son tan versátiles que se adaptan perfectamente a cualquier habitación de la casa y también a todo estilo decorativo.

Recomendación

Las lámparas colgantes tienden a quedar mejor en techos altos. Por eso, si tus techos son muy bajos, deberías evitarlas (salvo, quizás, en la mesa de comedor o sobre la barra de comer en la cocina, si es que la tienes). En el resto de las áreas, opta por candilejas, luminarias empotradas, plafones o escenas de luz basadas en una combinación de apliques, lámparas de pie y lámparas de sobremesa.