Un año para el olvido del picheo dominicano
Los registros negativos están a la orden del día. Johnny Cueto y Ervin Santana fueron blanco perfecto de lesiones
lea por la clasificación. En 2017 compiló marca de 12-11 con un promedio de carreras limpias de 3.64. Fue elegido al Juego de Estrellas. Pudo abrir 32 partidos y laboró en 205 entradas.
Este año se quedó en 18 partidos iniciados y ha trabajado en 112 entradas y dos tercios. El nativo de Puerto Plata tiene un salario en esta campaña de 11 millones 700 mil dólares.
Los problemas físicos se encargaron de hacer añicos cualquier intento por avanzar de Johnny Cueto con San Francisco. Arrancó la campaña a todo tren, compilando marca de 3-0 entre marzo y abril, con un promedio de carreras limpias microscópico de 0.84. Pero ahí mismo arribaron las dolencias en su codo derecho. Volvió en julio y después se anunció que su destino era el quirófano, algo que había evitado hasta más no poder. Se operó en agosto y se perderá parte de la campaña de 2019.
Su última gran estación fue en 2016, cuando su marca quedó en 18-5 y un promedio de carreras limpias de 2.79 y fue al Juego de Estrellas. Este año, el nativo de San Pedro de Macorís, devengó un sueldo de 21 millones 833 mil dólares.
Santana y Ureña
Otro serpentinero que sucumbió ante las lesiones fue Ervin Santana, el derecho de San Cristóbal que estaba en su último año de contrato con Minnesota.
Apenas pudo realizar cinco salidas en toda la contienda, la final de un pacto por cuatro contiendas y 55 millones de dólares que rubricó en 2015 con los Mellizos. Laboró en apenas 24 entradas y dos tercios, con registro de 0-1y un promedio de carreras limpias de 8.03. En 2017 fue seleccionado al Juego de Estrellas. Ganó 16 partidos, perdió ocho y su promedio de carreras limpias fue de 3.28.
El también diestro José Ureña ganó 14 encuentros con los Marlins en 2017, sucumbió en siete y su promedio de carreras limpias fue de 3.82. En este 2018 retrocedió en muchos aspectos.
Su foja es de 7-12, con un promedio de carreras limpias de 4.21 en 29 encuentros iniciados. Ha ganado sus tres últimas salidas, pero no hay mucho tiempo para salvar una campaña que sin duda le deja su aprendizaje.
Está llamado a trabajar en su control. Ha ponchado a 126 en 162 entradas y un tercio con 46 transferencias y le han conectado 147 imparables, pruebas irrefutables de que ha tenido mucha circulación en las bases de la oposición.
En 2017 golpeó a 14 rivales y este año suma 11, uno de esos bien famosos porque fue al sensacional novato Ronald Acuña Jr., de los Bravos, que le costó una sanción por cinco partidos.
Luis Perdomo, derecho de los Padres de San Diego, posee una marca de 1-6 con un promedio de carreras limpias de 7.75 en la actual estación.
Perdió tiempo de acción por una lesión en el hombro y se espera que siga en el relevo largo de la escuadra.
El también dominicano Luis Castillo ha recibido una gran oportunidad con los Rojos de Cincinnati. Su foja es de 10-12 co un promedio de carreras limpias de 4.52 en 30 partidos iniciados. Es su primer año completo en una rotación. Se espera un mejor 2018 de su parte.