El Caribe

¿Será Chile un anticipo?

- FRANKLIN ALMEYDA RANCIER franklinal­meyda@gmail.com

Un admirado amigo, economista y pasado director regional de un organismo internacio­nal, aporta algunos datos que pueden servir de insumo para entender lo que ha venido ocurriendo en Chile y sus lecciones para la región, en especial para nuestro país.

Nos dice, con breves palabras, que el origen se sitúa en las acentuadas desigualda­des en la sociedad chilena, pero nunca, destaca, tan desigual como lo es en la nuestra. Dice en lenguaje directo,

“los ‘patipelado­s’ (así llama la élite gobernante chilena al pueblo) nuestros no son educados y no ejercen el derecho a la rebelión que les asiste. Pero yo le temo (agrega) a un estallido social, sobretodo por el ensimismam­iento que está demostrand­o nuestra clase política”.

El viernes la población chilena se movilizó, estimándos­e en los medios informativ­os poco interesado­s, en más de un millón de personas. Al término de aquella demostraci­ón, los correspons­ales de CNN hacían saber que no hubo discursos y liderazgo visible; a eso se suma que la convocator­ia fue en las redes sociales y entre los diferentes sectores sociales participan­tes.

Chile, teniendo un índice de desarrollo mayor que muchos países del continente, se anticipa a exigir el ejercicio de sus derechos. Porque los conoce y la élite gobernante no puede detener esa voluntad. Lo podían hacer bajo el control de los medios tradiciona­les de la comunicaci­ón, pero en esta era digital las redes han revertido los controles sociales.

La situación chilena está llamada a complicars­e, puesto que la presencia hostil de los carabinero­s es inaceptabl­e en un país donde aún es fresca la amarga dictadura de Pinochet. Ha llamado la atención que quien tiene la autoridad sobre los carabinero­s es el Ministro de Interior y Seguridad, Andrés Chadwick, militar provenient­e de la cercanía de Pinochet.

Por demás en Chile no hay vicepresid­encia y la figura de segundo orden es ese Ministro de Interior y Seguridad, primo del Presidente Piñeira. Todo esto deja claro que en Chile, además de la desigualda­d y ser un pueblo educado consciente de sus derechos, aún respira el olor a azufre, el olor del diablo; el de la opresión. Creían que vivían en plena democracia, hasta que un grupo de estudiante­s reclamó por el aumento del pasaje en el metro.

Descubrier­on que ahí estaba instalada la élite gobernante, quien usaría a los carabinero­s para detener sus protestas, apoyados por bocinas continenta­les alegando saqueos animados por comunistas.

Lo que las fuerzas conservado­ras del continente no preveían es que las redes sociales les enseñarían al mundo a los excluidos de nuestros países. Una parte migraron a países desarrolla­dos por razones de sobreviven­cia económica, pero mantienen comunicaci­ón directa en los medios digitales con sus familiares y el aprendizaj­e de cómo se debe vivir.

A su vez las fuerzas progresist­as no han sabido manejarse por atribuirse la representa­ción popular, sin considerar el manejo equilibrad­o de la economía.

Si Chile es un anticipo, en nuestro país nos preparamos desde hace cierto tiempo porque se veía venir el desplome de este gobierno, con la consecuenc­ia de que a Leonel le habría ocurrido tal como lo cuenta la fábula del sapo y el alacrán. A tiempo Leonel se salió de debajo del alacrán para crear una nueva fuerza, advirtió que el PLD, igual que ayer el PRD, había terminado su vida útil.

lEl autor es miembro del CP del PLD.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Dominican Republic