Rivera y Valdespín celebraron la corona entre lágrimas y risas
Lino Rivera y Jordany ValFESTEJOS. despín se confundieron en un abrazo muy emotivo, donde el primero le dedicaba el título a su padre que falleció en diciembre pasado, mientras que el segundo a su madre María Guzmán.
“Esto es indescriptible”, dijo entre lágrimas Rivera. “Este es un triunfo que tiene mucho significado para mí, ya que se lo dedico a mi padre quien falleció y sé que se siente muy orgulloso desde el cielo mirando todo esto”, agregó.
Lino tomó las riendas del equipo romanense, a quien llevó hasta estas instancias, tras un negativo arranque de 0-5. “Lloré, pero de la emoción. Lloré porque pude llevar a un equipo, que en principio muchos no daban para llegar hasta aquí cuando arrancamos con el famoso 0-5”, sostuvo el capataz puertorriqueño, mientras recibía las felicitaciones de una gran cantidad de seguidores de los Toros que se trasladaron hasta el Estadio Quisqueya Juan Marichal a presenciar el partido.
Para Lino es su segundo título en la pelota local. El primero lo logró con las Águilas Cibaeñas en la campaña 20172018 ante los Tigres del Licey.
Asimismo, le dedicó el triunfo a toda la República Dominicana, quien consideró su segunda casa. “Ustedes no saben cuánto yo quiero a la República Dominicana. A los Tigres del Licey, a las Águilas Cibaeñas y a los Toros, a la Lidom”, dijo Rivera.
En tanto Valdespín también no paraba de llorar, pero de la emoción al saber que logró su primer anillo de campeón con los Toros, organización a la que llegó en 2018 procedente desde las Estrellas Orientales por los relevistas José Rafael Díaz (Jumbo) y Román Méndez.
“Dios tiene propósitos grandes con uno y este es uno de ellos. Esto es grande lo que estoy viviendo. La Romana se merece esto y más. Dije que en los entrenamientos el equipo se quedó con hambre de un campeonato y gracias a Dios que lo logramos. Hoy en día es misión cumplida del que celebro junto a mi mamá María”, manifestó el jardinero.